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Mi casa es pequeñita y además, tengo el inconveniente de que no tengo ni balcón ni patio, por lo que tender dentro de casa se convierte en una aventura. Se me ocurrió instalar un tenderete extensible de cuerdas en lo alto de la pared del cuarto de baño (por lo menos mi casa tiene los techos altos: 2.50 m) para colgar una colada de prendas pequeñas (quiero decir ni sábanas ni toallas grandes, para ropa de niño está muy bien). Como tengo ventana en el baño, la ropa se seca bien. Cuando me hace falta, extiendo las cuerdas de lado a lado y cuando no me hace falta, las cuerdas quedan recogidas y no se ven. Además, al situarlo tan alto, aunque las prendas cuelguen un poco, no impide el paso ni la visión en el cuarto de baño. Por supuesto, también tengo un tenderete normal en el suelo, que uso para sábanas y toallas. La pregunta del millón era dónde guardar semejante tenderete, no me cabía en ningún sitio… Y la respuesta de nuevo en el cuarto de baño! Puse dos ganchos en la pared detrás de la puerta, bien arriba para que no estobara al abrir la puerta, casi pegando al techo y ahí cuelgo el tenderete plegado. Está genial porque no me ocupa espacio, no se ve cuando entras, no estorba con la puerta y aprovecho el hueco que queda entre las patas con un perchero. Así lo tengo siempre a mano, sin hacer grandes esfuerzos…
Por mi falta de espacio, he aprendido a pensar no sólo en planos horizontales, sino también en vertical. En las paredes hay mucho sitio desaprovechado!
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