Navegando por internet me he encontrado esta noticia (pincha aquí) que cuenta la teoría del mundo intenso e intenta explicar o contribuir a la teoría del autismo.
Me quedo con el final de la noticia:
Henry Markram ha intentado ver el mundo desde la perspectiva de su hijo Kai y ha descubierto lo mucho que se reconoce en ella. Al hacerlo, ha prestado un gran servicio al colectivo autista, demostrando la compasión que los afectados por el espectro se supone que no pueden sentir. Si su teoría llegara a demostrarse cierta, no sólo tendremos que repensar nuestra actitud ante el autismo, sino también ante la reacción de la gente corriente frente al exceso informativo endémico de la vida moderna.
