
La Terapia Floral actúa a través de métodos vibracionales, es decir, mediante moléculas de agua que transportan los patrones de vibración de cada flor se “reordenan” los campos de energía asociados al cuerpo humano y es a través de este ordenamiento que se logra la reorganización del estado mental y emocional, lo que genera cambios neurológicos, inmunológicos y endocrinos cambiando así funcionamiento corporal como un todo, alcanzándose resultados globales, armónicos y paulatinos, más respetuosos del equilibrio original del organismo.