En la fotografía podéis ver el termómetro clínico infantil JFT90, un aparato que por sus características podríamos considerar profesional. Las mediciones de temperatura las realiza por infrarrojos, por lo que no es necesario que entre en contacto con la piel de los niños, el nivel de precisión es bastante bueno y varía en un rango más/menos de 0’2 ºC en la medición de la temperatura corporal. Es un termómetro multiuso que permite además medir la temperatura de una superficie o del ambiente, en este caso el nivel de precisión varía en un más/menos de 0’3ºC.
El termómetro clínico digital tiene un diseño ergonómico, en su fabricación no se han utilizado materiales con elementos químicos que puedan afectar a la salud del bebé, por supuesto no contiene mercurio (sustancia que como sabéis está prohibida), tampoco tiene cristal, de este modo se elimina cualquier riesgo en la toma de temperatura. Decíamos que la pantalla es digital, es grande, se ilumina y las lecturas se pueden hacer con total claridad.
Los controles son muy simples, un botón de encendido/apagado aunque hay que decir que cuenta con desconexión automática para ahorrar energía, tiene otro botón para memorizar las mediciones de temperatura pudiendo almacenar hasta 60 operaciones para realizar un seguimiento minucioso sobre la evolución de la fiebre. El tercer botón permite activar o desactivar los sonidos (alarmas o beeps), de este modo podremos realizar la medición de temperatura mientras duerme el niño y sin que le pueda despertar un ruido.
Realizar la medición es sencillo, basta acercar el termómetro a una distancia de unos 10 centímetros y pulsar en toma de temperatura, una vez realizada la medición, un sonido nos advierte de ello, a la vez también se muestra en la pantalla. En el caso de superar el rango de temperatura considerado normal, se activa la alarma de fiebre advirtiendo a los padres de la temperatura recogida. Cuenta con el correspondiente aval clínico que acredita su calidad, además de los oportunos certificados comunitarios que respaldan la seguridad.
Al ser un termómetro versátil con el que podemos realizar otras mediciones de temperatura, no se quedará guardado en el fondo del cajón como suele ocurrir con los termómetros que sólo miden la temperatura corporal. Como decíamos, la relación calidad/precio es bastante buena, podéis adquirir el termómetro clínico infantil JFT90 en farmacias o tiendas de bebés por un precio que ronda los 35 euros, a través de la página oficial de Beurer podréis conocer más detalles sobre el termómetro.
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Termómetro clínico infantil JFT90