No hay otro tema en los medios de comunicación este viernes que no tenga que ver con la catástrofe japonesa. Un terremeto de 8,9 en la escala Ritcher sacudió el país oriental suspendiendo todas las actividades deportivas, inclusive el Sumo.
Hasta el momento hay 1500 muertos y 88000 desaparecidos en la tragedia mas importante de los últimos 140 años.
Pablo Bastianini, argentino que milita en el club de fútbol Yokohama Marinos, contó al programa "90 minutos" de Fox que: "Se empezó a mover todo el departamento como un papel. Fue una situación horrible, nunca me había pasado. Si bien fue a 300 kilómetros de donde estaba yo, se sintió mucho".
A pesar del desconcierto reinante al futbolista nacido en Zarate le llamó la atención la actitud de los japoneses: "Me sorprendía la tranquilidad de la gente: no estaban desesperados, se lo tomaron con mucha naturalidad".