¿Tevez lo logró?

Durante la última pretemporada, Carlos Tevez dejó en claro su deseo de irse del Manchester City ya que quería pasar más tiempo con su familia. Sin embargo, una mediocre Copa América, sumado a la imagen de la eliminación con ese penal errado, hicieron que pese a algunas ofertas el argentino permaneciese en el equipo inglés.

Hoy, durante el partido ante el Bayern Munich por la Uefa Champions League, el “Apache” se negó a entrar luego de que el técnico, Roberto Mancini, hiciera ingresar primero al holandés De Jong por el delantero bosnio Edin Dzeko.

Tévez pensó que era él el que iba a entrar y ofuscado, dejó el calentamiento y regresó al banco de suplentes. Con el partido perdiendo 2 a 0, la sustitución de un delantero por un volante central para “cuidar el resultado”, pareció, al menos, mezquina.

Ésta parece ser la gota que rebalsó el vaso. Nueve meses atrás, en una situación similar, Tévez le recriminó al italiano el hecho de haberlo sacado durante un partido. Pero, a diferencia de ese caso, la sangre no llegó al río.

Ya en conferencia, Mancini se despachó a gusto y le cerró la puerta de manera definitiva al argentino:

Yo lo quise poner pero él se negó. No sé por qué. Faltaban 30 minutos y se podía cambiar el resultado del partido. Es una mala situación, yo no puedo aceptar que un jugador haga algo así y no puede pasar esto en un partido como éste, pero también es malo para el equipo”.

“El terminó conmigo, yo terminé con él. Si por mí fuera, estaría fuera del club. Vamos a discutirlo con el dueño del club en los próximos días”.

Por su parte, el último goleador de la Premier League no se quedó atrás, y respondió, con un dejo de victimización:

La decisión fue de él. He sido un profesional durante el último año. Este último año he sido el máximo goleador y ya transmití mi deseo de dejar (Manchester City) por razones familiares, sin dejar nunca de esforzarme al máximo. No merezco ser tratado así“.

Hoy por hoy, a menos que se de una muy improbable reconciliación entre ambas partes, Tevez está un pie y medio fuera del City. Estará sin jugar hasta que se vuelva a abrir el libro de pases, cuando pueda cumplir su tan anhelado objetivo de irse de Inglaterra