Aunque tras interminables idas y vueltas no recaló en ningún otro club y deberá permanecer en el Manchester City apartado del grupo y sin jugar, Carlos Tevez fue el gran protagonista del mercado invernal del fútbol europeo.
En conflicto permanente con la entidad citizen desde que se negara a ingresar al campo en aquel recordado encuentro en el que el City enfrentó al Bayern Munich en el marco de la Uefa Champions League, el “Apache” forzó de una y otra manera su salida del club pero por propios caprichos suyos o por falta de voluntad de los directivos no pudo destrabar su situación de ninguna forma.
En dicho contexto, el primero en hacer publico su interés en el jugador fue el Milan, club que aunque en un momento pareció tener todo acordado no convenció nunca a los dueños del Manchester City por no querer comprarlo sino sumarlo a préstamo y que finalmente se bajó de la negociación luego de que Alexandre Pato se negara a pasar al Paris Saint Germain, en el marco de una transacción que de haberse concretado le hubiera permitido al combinado “Rossonero” sumar fondos para realizarle al City una oferta sustentable.
Posteriormente, el que lo intentó fue el propio PSG, que presentó una oferta formal de 37 millones de euros que fue aceptada por los directivos del actual líder de la Premier League -en su momento invirtieron 35- y le ofreció a Tevez un contrato de tres temporadas a cambio de 8 millones de euros anuales . El mismo fue rechazado por Carlitos, con ansias de recalar en Milan, por lo que la operación se cayó cuando entre los clubes ya estaba todo acordado de palabra.
La mencionada negociación representó una oportunidad perdida tanto para los dueños del City, quienes al recibir la oferta apropiada que tanto esperaban habían encontrado la manera de ponerle fin al conflicto, como para Tevez, quien por mostrarse reacio a aceptar la mejor oferta ahora tiene por delante un futuro incierto y lleno de oscuridad, del que sin mucho de mea culpa el mismo se encargó de hablar en dialogo con la revista alemana Kicker Sportmagazin.
Pienso que la situación se ha vuelto cómica. Yo quería dejar el Manchester City y hubo ofertas procedentes de Italia y España. Sin embargo, al final todo se colapsó porque el City no quiso aceptar ninguna de las propuestas. Dijeron que costé mucho dinero y que no querían dejarme marchar a un bajo costo. Pero tampoco me quisieron ceder. Realmente no tengo ni idea de lo que pasará conmigo durante los próximos meses. Estoy es un espiral negativo”.
Yo quiero jugar al fútbol, pero por ahora tengo que estar contento con jugar al golf o asistir a la despedida de mi querido amigo Martin Palermo”.
La situación es esta y a esta altura y con el mercado de pases ya cerrado, lo único cierto es que el menos por un buen tiempo más los amantes del buen fútbol nos seguiremos perdiendo la oportunidad de seguir viendo a Carlos Tevez en la cancha, en la que brilló y supo ganarse la idolatría de muchos.