La primera de las película que voy a comentar en esta entrada es "The Lovely Bones", último film del oscarizado Peter Jackson. Nos encontramos ante otra de las películas que más prometía de cara a la temporada de premios, pero que ha terminado siendo ignorada tanto en los Globos de Oro (donde consiguió una nominación a Mejor Actor de Reparto para Stanley Tucci) como en los Oscar (una nominación, en la misma categoría que los Globos). Y es que, esta fantasía onírica, no ha gustado a la crítica estadounidense (y ya veremos por aquí cuando se estrene la semana que viene). Es curioso que los pocos premios que ha recibido (The Broadcast Film Critics Association a la Mejor Actriz Joven, los premios de la crítica de Las Vegas y de Phoenix también a la mejor actriz joven) hayan ido a parar a Saoirse Ronan, ignorada en los grandes premios.
Basada en la novela "Desde mi cielo" de Alice Sebold, cuenta la historia de Susie Salmon, asesinada a los 14 años, y que ve desde el cielo, como continúa la vida de su familia, mientras un detective lleva a cabo la investigación.
Lo mejor: Saoirse Ronan, que demuestra ser una actriz de los piez a la cabeza a pesar de su corta edad. Stanley Tucci como asesino; de verdad que da miedo. Y el resto del reparto (Weisz, Whalberg, Sarandon, Mclver...). Y la banda sonora.
Lo peor: tal vez, lo más reprochable de la película, es el abuso de escenas del cielo. Son efectivas, pero restan dramatismo al conjunto.
Valoración: 9/10.
La otra película es "A seriour man", la extraña película de los hermanos Coen. Me quedan muchas películas por ver de estos directores, pero las que he visto me han gustado, y esperaba encontrarme ante un film interesante. Y me he encontrado ante una largo de 105 minutos raro de narices, y que termina dejándote plantado ante la pantalla (libre interpretación de los hechos, que le llamo yo).
Estamos en 1967, y Larry Gopnik, el protagonista, ve como su vida empieza a derrumbarse. Su mujer le pide el divorcio, debe hacerse cargo del entierro del amante de su mujer, están dañando su carrera como profesor a raíz de unas cartas anónimas, y debe hacerse cargo de su hermano enfermo.
Tras conocer la sinopsis, y añadirle el sello Coen podríamos estar ante un film divertido, pero todo lo contrario. Es una película, que sin ser lenta se hace lenta. Que vale, tiene un reparto desconocido que cumple con creces, pero no hay por donde pillarla.
Cuenta con dos nominaciones a los Oscar: Mejor Guión Original y Mejor Película (todo un despropósito, ya que el último film de Eastwood no está nominado, cuando una película como esta sí lo está). Ha recibido premios el guión (la crítica de Boston, la National Board of Review, la Sociedad Nacional de Críticos) y su actor (el Satellite Award).
Lo mejor: el reparto (especialmente Michael Stuhlbarg).
Lo peor: es difícil de ver, y más aún, de entender.