Por el sudeste asiático se lleva mucho lo del cine de terror, sus maldiciones y espectros llegan por aquí con relativa frecuencia para goce del friquismo patrio. Uno de los países de aquellas latitudes, Indonesia, nos ofrece una de venganzas sobrenaturales cuyas víctimas son unos huérfanos ya creciditos de visita al orfanato de su infancia. El meollo tarda un poco en empezar, pero cuando lo hace las truculencias se desatan sin necesidad de mayores explicaciones, salvo cuatro frases dichas entre borbotones de sangre, y obviando toda lógica argumental para invocar la fe y buena predisposición del espectador. Los efectos infográficos cantan un pelo y los homenajes/plagios al género abundan, por lo que la cinta acaba siendo una de tantas sin relevancia alguna.
Puntuación @tomgut65: 4/10