El hombre tiene que establecer un final para la guerra. Sino, ésta establecerá un fin para la humanidad”. John Fitzgerald Kennedy.
The Walking Dead ha llegado al final de su tercera temporada que ha tenido una calidad muy alta sobre todo si la comparamos con las dos anteriores pero también nos ha ofrecido unos episodios mejores que otros, algo que por otra parte es natural en una temporada de 16 capítulos pero aún así puedo afirmar que en general hemos gozado de una muy buena temporada que nos anima a esperar la cuarta con mucha expectación por parte de los que somos fans de esta serie imprescindible a pesar de sus virtudes y de sus defectos.
En estos últimos episodios hemos podido asistir entre otras cosas al tenso encuentro entre Rick Grimes (Andrew Lincoln) y el Gobernador (David Morrissey), el Señor de Woodbury le ofrece la paz a Rick a cambio de que éste le entregue a Michonne (Danai Gurira). Por otra parte Andrea (Laurie Holden) termina descubriendo los tenebrosos planes que el Gobernador tiene preparados para los habitantes de la prisión y huye de Woodbury pero es atrapada por el tirano antes de que pueda avisarlos. Merle Dixon (Michael Rooker) ante las dudas de Rick en el asunto de Michonne decide entregarla él mismo pero durante el camino hacia tan repugnante acción la suelta y la deja marchar, Merle ataca al cruel Gobernador pero no tiene éxito y es asesinado por tan malvado personaje. Al menos Merle ha muerto redimiéndose de sus pecados del pasado pero aún así tiene que ser rematado por su hermano Daryl (Norman Reedus) ya que resucita como un zombi. De esta manera llegamos al que ha sido el último capítulo de la temporada.
EL DEMONIO DE LA TIERRA DE LOS MUERTOS.
No dejes que el Mal te confunda y creas que puedes tener secretos para él”. Franz Kafka.
Si hay algo que nos ha demostrado el último capítulo de la tercera temporada de esta serie es la gran locura y la inmensa maldad del Gobernador, el auténtico demonio del mundo de los muertos. Al principio del capítulo lo vemos golpeando a Milton (Dallas Roberts) y lo lleva junto a Andrea que está prisionera. El Gobernador apuñala a Milton y lo deja agonizante y encerrado con Andrea para que éste la ataque cuando se convierta en un zombi. Milton ha dejado unos alicates cerca de Andrea para que ésta pueda liberarse pero finalmente se convierte en un muerto viviente y la muerde arrastrándola a un destino cruel. El Gobernador y los suyos atacan la cárcel pero la excelente estrategia de sus defensores provoca la huida del Gobernador y sus secuaces. Cuando consiguen parar los vehículos el Gobernador dominado completamente por el Mal más oscuro de su retorcida alma dispara sin compasión a la mayoría de sus lacayos y se marcha junto a sus dos personas de confianza.
Rick, Daryl y Michonne llegan hasta Woodbury y se encuentran con Andrea que agoniza de forma horrible. Todos muestran una gran pena ante el sufrimiento de Andrea que decide poder matarse para no regresar como un muerto viviente. Triste final el de la valiente Andrea que solo quería mediar y conseguir la paz entre los dos grupos en conflicto pero éste es un mundo horrible y sin compasión con los que no desean la guerra. Rick y los suyos regresan a la cárcel y lo hacen acompañados de algunos habitantes de Woodbury que han decidido unirse a ellos y de esta manera tan brusca y llena de interrogantes termina la temporada ¿Qué nuevas maldades llevará a cabo el Gobernador? ¿Cómo serán las relaciones entre los habitantes de la cárcel y los recién llegados? ¿Ganará el ser humano su guerra contra los muertos vivientes? El plano final de la temporada es la cruz de una tumba que parece recordarnos que nos encontramos en el mundo de los muertos, un lugar maldito y tenebroso controlado por la Dama Oscura y sus ejércitos.