Todo el mundo sabe que una de las pasiones de Emily the Strange es construir máquinas y artefactos de los más variado.
En esta ocasión ha inventado una máquina para trasladarse en el tiempo y en el espacio. Piensa en darse un paseo por el Nueva York punk de los años 70 o ver los dinosaurios, pero un problema familiar la obligará a viajar a una época bien distinta.
Así, Emily llega hasta finales del siglo XVIII. Y el problema no es que se tope con un mundo que no es el suyo, sino que se quedará atrapada en él...
12.95 € 234 págs. 10 de febrero de 2011