En 1957 el padre del Surrealismo André Breton veía cumplido un sueño, la publicación del ensayo en el que trabajó durante muchos años, El Arte Mágico. Notas, documentos, e imágenes aparecían en forma de libro, como parte de un proyecto terriblemente ambicioso, una historia universal del arte. El prestigioso Club Français du Livre de París editó 3.500 ejemplares numerados que se vendieron rápidamente entre los suscriptores. El inmediato éxito de la publicación convirtió el libro en objeto de deseo de especialistas y bibliófilos. Por desgracia André Breton no vivió para ver publicada una segunda edición y tuvieron que pasar más de treinta años, hasta 1991, para que la obra volviera a las librerías. La editorial Atalanta acaba de publicar la versión en español, traducción de la edición de la editorial Phébus de 1991.
Autor colaborador: Maira Herrero,
Master en Filosofía.
En 1957 el padre del Surrealismo André Breton veía cumplido un sueño, la publicación del ensayo en el que trabajó durante muchos años, El Arte Mágico. Notas, documentos, e imágenes aparecían en forma de libro, como parte de un proyecto terriblemente ambiciosa, una historia universal del arte.
El prestigioso Club Français du Livre de París editó 3.500 ejemplares numerados que se vendieron rápidamente entre los suscriptores. El inmediato éxito de la publicación convirtió el libro en objeto de deseo de especialistas y bibliófilos. Por desgracia André Breton no vivió para ver publicada una segunda edición y tuvieron que pasar más de treinta años, hasta 1991, para que la obra volviera a las librerías. La editorial Atalanta acaba de publicar la versión en español, traducción de la edición de la editorial Phébus de 1991. Existen importantes diferencias entre la primera y la segunda edición. En esta última, los textos y las imágenes aparecen ordenadas de forma correcta, así como los pies de foto, las notas explicativas y las fuentes utilizadas, todo gracias a Gérard Legrand, estrecho colaborador y conocedor del enmarañado conglomerado de documentos acumulados en el estudio del poeta.
El Arte Mágico formaba parte de un ambicioso plan del crítico de arte y ensayista Marcel Brion que quiso reunir en cinco volúmenes una historia general del arte que respondiera a la visión y a las aspiraciones del momento, donde se incluían además de El arte mágico, El arte religioso, El arte clásico, El arte barroco y El arte por el arte. Todos ellos a cargo de reconocidos especialistas y hoy olvidados en los estantes de alguna biblioteca.
El Arte Mágico introduce al lector en una travesía muy personal sobre la íntima relación a lo largo de la historia entre magia y arte. Escarba en busca de ese mundo de utopías visionarias a partir de un mapa personal, apartado, como no puede ser de otra manera de lo canónico. Para Breton el arte siempre fue el motor del mundo y desde su óptica surrealista quería reescribir una historia del arte que llegara a un público nuevo.
En este ensayo la tradición es objeto de estudio y pretende atraer todo aquello que une ese mundo con lo mágico. Para él las obras de arte son un medio para investigar otras vías de conocimiento, no son una investigación en sí mismas. Busca obras enigmáticas, obras olvidadas y confronta distintos periódos artísticos e históricos en un libre juego para que el espectador/lector encuentre nuevos caminos de comprensión, en esa creencia de que su visión del arte puede llegar a unir otras culturas y otras épocas, profundizando en las circunstancias en que se crearon y en su significado. Trata de componer una conciencia lírica universal enfrentada al conocimiento discursivo. Una comprensión directa de todo el arte ya sea primitivo o evolucionado, culto o popular, sin codificaciones y sin prejuicios.
El libro termina con Encuestas, apartado donde el autor plantea cinco preguntas a filósofos, escritores, críticos y estudiosos para conocer lo que él consideraba “opinión autorizada”. Solo haré referencia a la segunda de las preguntas: El arte mágico, en el sentido más amplio que se entiende aquí, ¿es la expresión de una necesidad inalienable del espíritu y del corazón que la ciencia, como la religión, no están en condiciones de satisfacer?. Las respuestas son en muchos casos críticas y evidencian claros desacuerdos con el autor.
Atalanta ha hecho un trabajo impecable de edición donde texto e imágenes están cuidados de tal manera que la comprensión del espíritu de la obra queda totalmente satisfecha.
André Breton
EL ARTE MÁGICO
Atalanta. Septiembre de 2019
- ¿Tiene el arte la capacidad de cambiar la vida? - - Alejandra de Argos -