«Los seres humanos constituyen una fauna y flora extrañas. De lejos parecen insignificantes; de cerca parecen feos y maliciosos»,dice Henry Miller en Trópico de Cáncer. Uso presente porque el libro, a pesar de estar editado en 1933, es pura actualidad. Dice muchas cosas, toda la novela es un libro de citas. Millones, centenares de millones.
Solo quería señalar una referente a la literatura y discutible. Para pensar y reír un rato:
«Hay algo obsceno en ese amor del pasado que acaba en colas de parados esperando recibir comida gratis y en refugios subterráneos. Algo obsceno en esa estafa espiritual que permite a un idiota espolvorear agua bendita sobre los Grandes Berthas y acorazados y explosivos instantáneos. Cualquier hombre que se haya dado una panzada leyendo a los clásicos es un enemigo de la raza humana».
«El caso es que allí se reunían en solemne cónclave, los padres y los presuntuosos a quienes el Estado contrata para doblegar las mentes de los jóvenes. Siempre ese proceso de sometimiento, de jardinería ornamental para volver la mente más atractiva».


¿Tiene razón Henry Miller?