Sólo de una cosa podemos culpar a Los Beatles: De haber inspirado a multitudes faltas de talento para hacer grupos a su imagen y semejanza. Lo mismo podría decirse de Ferrán Adriá: Hizo soñar a cientos de miles de desadaptados sociales con ínfulas de chefs, que podrían esferificar, cocinar al vacío, deconstruir platillos y hacer cocina molecular en cualquier rincón del planeta.

Uno de los rincones donde la nueva cocina viene a ser sinónimo de cocina engañabobos es el restaurante Tierra Nuestra. Ubicado cerca de Gustavo Baz, en Tlalnepantla, México, el restaurante en cuestión descubrió que no había otro, familiar, por el rumbo y que la buena gente de Viveros de La Loma andaba necesitada de alguna réplica de Sanborns por el rumbo.
Con el pretexto de la cocina abierta, los chefs ambulantes por el piso ligando con las

Police Gourmet tuvo que intervenir y hacer este artículo pues el arroz de Tierra

Nuestra es peor que el de cualquier fonda de por el rumbo, sus sopas, un poco por abajo del nivel de las de Sanborns, sus tacos de barbacoa -con la salvedad de que tiene un poquito más de carne- iguales que los de cualquier tianguis de la zona; su milanesa, pellejuda y sin chiste. Resultado: Si quiere usted pagar el triple por platillos mediocres supuestamente cocinados con más gracia y descritos en el menú con estilo “gourmet”, vaya a que le quiten su dinero en el Tierra Nuestra.
Calificación de Police Gourmet (del 1 al 10): 2
NOTA.- Mi hija y yo tenemos criterios diferentes respecto a muchas cosas, de manera que no asumo responsabilidad alguna respecto a lo que ella escriba.
COMENTARIOS DE MI HIJA, LA MENOR (es adolescente):
Tierra Nuestra?
El mundo se ha convertido, sobre todo en este país, en una bola gigantesca llena de gente floja, copiona, salida de la escuela sin estudios acabados, para empezar una “carrera” que los hará “millonarios”, y que piensa que si algo funciona en otros países, debe hacer algo similar, pero el problema es que en la mayoría de los casos, el nombre

Comer en el restaurante Tierra Nuestra es como escuchar un pésimo monólogo de algún comediante fracasado, y te ríes, pero no porque sea bueno, sino por histeria, aparte de

con mucho resentimiento. Y todavía después de ver a la mayoría de sus clientes comer como si estuvieran en su restaurante favorito, saboreando esa sopa que sólo por tener un nombre diferente y un costo mayor al de las fondas, creen que es de mejor calidad… te das cuenta de lo mal que están y te da más coraje. Por eso, como no hay casi quien se queje, los restaurantes siguen igual, o peor…
Sopas con sabor a pasta quemada, y arroces no muy diferentes a los de la Comida Corrida, que tan popular en este país se ha vuelto también. Pero lo peor, cuando el coraje ya se te va

EXCUSE MY FRENCH!!!
Normalmente no hablo así!
Calificación (del 1 al 10): -7 ¡con números muy rojos!

