Como ya muchos sabréis hace unos días nos dejo la compañera bloguera Astrid. Yo no la conocía, ni a su blog, pero siempre que me entero de que algún compañero bloguero nos deja me crea un vacío en mi interior. Al enterarme de tan mala noticia por Paco de Lazy Blog, he querido sumarme a este gran homenaje que le rendimos en estos días preparando una receta del blog de Astrid en el que se pueden encontrar miles de pinchos muchos de ellos facilísimos.
He escogido esta receta por su sencillez y ya de cara al buen tiempo que como entrante nos ha encantado. Espero que os guste. Va por Astrid y su familia, quedará siempre en nuestro recuerdo.
Os dejo con este fantástico entrante hasta el día siete de junio más o menos pues voy a estar muy liada y no podré atenderos. En estos días algunos me iré a mi querida aldea a descansar, he tenido unos días muy duros y necesito pensar, pasear, respirar...
INGREDIENTES
-6 tomates canarios, que tienen un tamaño pequeño y muy redondito
-la mayonesa de un huevo
-dos latas de ventresca de bonito
-medio vaso de aceite de oliva virgen extra
-un puñado de perejil fresco
Lo primero decir que con estos ingredientes he rellenado los seis tomates y ha sobrado un poco de relleno que nos servirá para una o dos tostas para la noche. También ha sobrado aceite de perejil que tendré en la nevera para utilizarlo en otra ocasión.
PREPARACIÓN
Pelamos los tomates con un cuchillo muy afilado o bien podemos escaldarlos unos minutos en agua hirviendo. De este modo la piel se desprenderá sola. Yo siempre los pelo y tardo muy poco.
Cuando los tengamos todos pelados con un cuchillo afilado cortamos en recto la parte del rabito y cortamos alrededor con cuidado. Lo vaciamos con un vaciador pero con cuidado, pues tienen la carne muy frágil y se rompen con facilidad.
Según los vayamos vaciando los colocamos en un plato boca a bajo para que vayan soltando el exceso de agua.
Todo el relleno lo picaremos y lo metemos a un tarro de cristal y a la nevera. Nos servirá para el próximo guiso que cocinemos. Cuando tengamos todos pelados y vaciados preparamos una mayonesa de un huevo. Abrimos las latas de ventresca y escurrimos bien los lomos echándolos a continuación en la mayonesa. El aceite de las latas no se tira, se echa a un tarro pequeño, metemos a la nevera y nos servirá para aliñar nuestras próximas ensaladas. Mezclamos pero sin desmenuzar mucho la ventresca, dejando trozos que se noten al masticar.
Por otro lado, en la picadora o en el vaso de la batidora ponemos un puñado de perejil y medio vaso de aceite o algo menos y picamos o batimos bien.
Este es el aceite verde de perejil. Ahora cogemos un tomate, lo rellenamos bien dejando que se salga un poco y colocamos boca abajo en la fuente donde los vamos a servir. Así con todos.
Metemos en la nevera para que se enfríen hasta el momento de servir que salsearemos un poco con el aceite de perejil. Yo lo he echado en un biberón pequeño y lo que me ha sobrado lo tengo en la nevera.
No os parecen preciosos?