Desde hace unos meses los noticieros y muchos medios de difusión nos bombardean constantemente con las noticias de “Ocupa Wall Street” (OWS). Sin embargo en los últimos días las cosas parecen estar tomando el rumbo violento con tal de extinguir las pacificas protestas en contra del poder omnímodo de las empresas y instituciones financieras que manipulan a su conveniencia a políticos y gobernantes.
Primero ellos te ignoran, después ellos se ríen de ti, después ellos luchan contra ti, después tú ganas…
- GhandiMuchos norteamericanos de todas las tendencias políticas no logran aun sobreponerse a las sangrientas imágenes que muestran la brutalidad policiaca empleada contra los manifestantes de OWS en distintas ciudades del país. Por otra parte el Sindicato Nacional de Periodistas ha denunciado los arrestos y vapuleos a los que han sido sometidos los corresponsales en el ejercicio de sus funciones. Como si todo esto fuera poco, surgen denuncias de que agentes del Departamento de Seguridad Nacional (Department of Homeland Security) han participado en la represión y asesoría a las fuerzas policiales locales. Esto último es anticonstitucional, la ley prohíbe al gobierno o agencias federales inmiscuirse en asuntos locales, también prohíbe la creación de fuerzas policiales federales.
Vista la reacción violenta en contra de unos manifestantes sin lideres, desarmados y para nada violentos, cabe preguntarse ¿por qué?, ¿cuál es la urgencia del gobierno por acabar a toda costa con las protestas, sí como dicen los medios de comunicación masiva OWS no tiene un mensaje o plataforma definida?
Para mi sorpresa, he tropezado con un artículo de Naomi Wolf[1], en el que la periodista de “The Guardian” enumera las tres respuestas principales que los manifestantes le han dado a la pregunta: ¿Qué es lo que exigen ustedes? Veamos.
Respuesta No. 1: Saquemos el dinero de la política. La más citada fue la creación de una ley que ponga límite a la conocida Ley “Citizens United” (Ciudadanos Unidos) que permite la donación de sumas ilimitadas a las campañas políticas.
Respuesta No. 2: Reformas al sistema bancario para eliminar el fraude y la manipulación. En este sentido el reclamo más grande es re establecer la conocida Glass-Steagall Act, ley emitida durante la Gran Depresión y que fue eliminada en el mandato del presidente Bill Clinton. Esta ley estipula que los bancos de inversión y comerciales deben operar de manera separada. Sí se restableciera la ley, podrían entonces corregirse las condiciones que llevaron a la última crisis financiera, al impedir que los bancos de inversiones tomen riesgos con el objetivo de obtener ganancias, las cuales crecen de la nada y que al final terminan quebrando bancos comerciales y de ahorros.
Respuesta No.3: Esta es la más iluminada de todas. Emitir leyes que prohíban y cierren los agujeros legales que permiten a los miembros del Congreso aprobar o pasar leyes que afecten a las corporaciones con sede en el estado de Delaware y en la que muchos de ellos son inversionistas.
No seamos tontos, cualquiera de estos tres reclamos es más que suficiente para que el estado y su brazo policial le den patadas y palo hasta que se cague en la hora en que nació.
Sí todavía no lo entiende, explíqueme cómo es posible que el Departamento de Seguridad Nacional que sólo puede actuar bajo la supervisión de un comité del senado y con la aprobación del presidente haya decidido salir a capturar a los vagos de OWS, como algunos les llaman. Coincidencia, el jefe del Subcomité Senatorial Para la Seguridad Nacional es el representante por Nueva York Peter King.
Pero, un momento, ¿cómo es posible que el congreso haya sugerido el uso de la violencia en contra de sus pacíficos electores? La respuesta es bien sencilla, en los últimos años los miembros del congreso llegan a este perteneciendo a la clase media o media-alta, pero cuando terminan sus mandatos se retiran con fortunas increíbles. Por ejemplo, el pre candidato presidencial Newt Gingrich cobra 1.8 millones de dólares por una consulta de unas pocas horas sobre asuntos de interés especial. ¿Serán acaso estos asuntos de interés especial similares a los que llevaron a Marta Stewart a la cárcel?
A estas alturas, creo que deberíamos empezar a conectar los puntos para entender lo que está pasando, quizás sean las primeras batallas de una nueva guerra civil, guerra en la que por ahora el bando gobernante ha escogido el uso de la fuerza. En esta batalla el Congreso con el beneplácito del Presidente, ha usurpado la violencia y organizado la represión en contra de la gente que supuestamente ellos representan.
Referencias:
[1] The Guardian – The shocking truth about the crackdown on Occupy
[2] Wikipedia – Occupy Wall Street
[3] Wikipedia – Charging Bull
[4] Wikipedia – Wall Street
[5] Adbusters – #OCCUPYWALLSTREET
[6] Wikipedia – Glass-Steagall Act
[7] Wikipedia – Department of Homeland Security