
El topo ibérico es un endemismo de la Península Ibérica y es la especie que se encuentra en Asturias, donde encuentra condiciones realmente favorables para vivir. Su óptimo está precisamente en sierras como las de Tineo y Salas, de mediana altitud, humedad suficiente y abundante presencia de ganado que favorecen la abundancia de lombrices de tierra, la presa de la cual se alimenta en mayor medida.
