“Torrente 4, Lethal Crisis”, sin comentarios…

Bueno chicos, acabo de llegar del cine de ver la última parte de la saga de Torrente ( “Torrente 4, Lethal Crisis” ), y a pesar de que este blog no tenga nada que ver con el el tema, no podía contenerme; y menos aún tras haber pagado 21 euros por dos entradas ( en 3D ).

He de reconocer que desde los inicios de la tetralogía he sido un fan incondicional del “investigador privado” más famoso del celuloide; de sus salidas de tono, de sus ropas de contenedor y de sus momentos “épicos”; pero que queréis que os diga, la calidad y la originalidad del trabajo que se mostró en las primeras dos partes, se perdió en la tercera entrega; y muy a pesar mio, y por lo que acaban de ver mis mareados ojos ( es lo que tiene el 3D ), en esta última parte la cosa ha caído a un pozo sin fondo lleno de actrices de medio pelo, hijos de tonadilleras y aburguesados balonpedistas. 

Para empezar, la credibilidad de muchos de las apariciones deja mucho que desear, notándose a leguas la decisión de no emplear actores profesionales. Y cierto es que esa era la gracia de la película, que apareciesen gente de lo más variopinta; pero que queréis que os diga, por poner un claro ejemplo, uno de los personajes a los que más bombo se les dio – Belén Esteban, “la Princesa del Pueblo” -, da vida a un papel insulso, que apenas aparece unos segundos en pantalla, y que no da lo que se esperaba de ella. Comparto la opinión de muchos en cuanto a la actuación de Kiko Rivera - “Paquirrín” -; muy bien chaval, por fin haces algo de utilidad en la vida. Al menos el tío no se hace pasar por lo que no es, por lo que no tengo mucho que decir en su contra. También muy bien Josemi ( el personaje al que tiene que matar Torrente ).

Los efectos especiales; señores, esto no es Hollywood. Ya se que la intención de Santiago Segura, como dijo el otro día él mismo en un programa de Antena 3, era la de hacer una “película palomitera”. Y bueno, eso ha conseguido, ni más ni menos; pero no se, al igual que en la tercera entrega, los efectos especiales en 3D...no acaban de convencerme, se nota mucho la mano de lo digital. Imagino que para gustos estará hecho el mundo.

Y la trama...¿ no se podían haber pensado algo con “más chicha” ?

En fin, que me ha decepcionado la película; y si, es cine palomitero...de a 10 euros por barba. Que le vamos a hacer.

Por cierto, a pesar de que no sea muy partidario de los triunfitos, la actuación final de David Bisbal es de lo poco salvable.