18 llamadas, 56 mails en una cuenta, 44 en otra, tres reuniones a la misma hora, y tres reuiones a las que debo ir. Dos de mis tres jefes, de baja, y los proveedores, que parece que les sobra el trabajo, y deciden que son ellos cuando eligen mandarte un presupuesto.
Con semejante panorama, a media mañana no queda otra que escaparse e ir a desayunar (again) un buen pincho de tortilla, y un botellin de agua, que claro, hay que cuidarse para la #operacionbuenorra (jajaja, esto es como lo de la sacarina en el café tras una alubiada en la Arboleda). Así que con toda esa tensión acumulada, acabas deambulando cual zombie versión diurna por las calles de Barakaldo, hasta que de puro aburrimiento, caes en un bar, de nombre Avenida sito en la Avenida de la Libertad.
Una que entra y espera paciente a que el muchacho de la barra la atienda. Me sonrie, y se pone a atender una corbata con patas. Luego a dos corbatas más con patas que han entrado después. Cuando va a pasar de mí por tercera vez, me pongo seria, y le digo con voz firme, que CUANDO PUEDA me sirva un botellin de agua y un pincho de ESTA tortilla. GRACIAS. Oye, de repente, una se hace visible otra vez entre tanta corbata. Chica, ni que ese complemento fueran galones de descubrimientos de medicina y/o física nuclear, coñe, que es ¡una corbata! Yo llevo tacones, ¿no vale?
Me comí mi tortilla, ahi, en soledad. Bueno, acompañada del Marca, que no habia mas prensa (así va el país, gobiernos salvando empresas privadas y bancos, y luego no hay ayudas para incentivar el empleo y nuevas empresas, y los demás, leyendo el Marca). Y pagué, y ahora sí, sonrisa al camarero.
BAR AVENIDAAvenida de la Libertad, 17. Barakaldo.
Dicen las señoras del pueblo que las tortillas no son del nivel de la Galatea, aunque dicen igualmente que intentan fusilar la receta. La que yo probé, jugosa, templada, con una loncha de queso derretido, jamón york, mahonesa, capa de tortilla de espinacas y huevo rallado; una bomba deliciosa, que sin comparar a la Galatea, estaba buena, cierto es que con tanto complemento, apenas aprecias la tortilla en sí, una pena. Las comparaciones siempre son odiosas.
Tortilla a gritos + botellín de agua de 350ml, 3,10€