Tostas de huevos de cordoniz con jamón

Las tostas constituyen un plato cómodo, rápido y apto para todos los públicos y para todos los gustos debido a que admiten un sinfín de combinaciones. El único secreto para que una tosta resulte todo un éxito es la calidad de la materia prima a emplear. Un buen pan de pueblo con rebanadas grandes y mucha miga, un jamón serrano de calidad y bajo en sal y unos tomates sabrosos sin olvidar el mejor aceite de oliva, garantizan el resultado final.

Ingredientes (para cuatro tostas):

- 4  rebanadas de pan de pueblo o pan de bolla- 8 huevos de codorniz- 4 lonchas de jamón serrano- 2 tomates - 1 diente de ajo- aceite de oliva- sal y pimienta 

Preparación:

Cortamos el pan en rebanadas gruesas - de unos dos centímetros de grosor -. Tostamos el pan por ambos lados en una tostadora, en una sartén, en el horno o en la plancha como he hecho yo. Mientras doramos el pan pelamos y cortamos los tomates en dados y dejamos en un colador para que eliminen el líquido sobrante.Reservamos el pan tostado y freímos los huevos de codorniz con un poco de aceite en el fondo, lo justo para que no se peguen y se rompan. ponemos una pizca de sal sobre cada huevo.. Estos huevos debido a su pequeño tamaño se hacen muy rápido. En  cuanto cuaje la clara los retiraremos para que la yema quede líquida. La cáscara de los huevos de codorniz es muy dura, para romperla tienes que hacer una incisión con un cuchillo y a partir de ahí romper la cáscara. Si eres consumidos habitual de huevos de codorniz hay a la venta unas tijeras especiales para romper su cáscara sin ninguna dificultad.Montamos las tostas. Frotamos con el diente de ajo las rebanadas de pan y regamos con un chorrito de aceite de oliva. A continuación ponemos el tomate con un poco de sal y pimienta y por encima la loncha de jamón. Coronamos la tosta con dos huevos de codorniz por encima.

Curiosidades:

Los huevos de codorniz a pesar de su pequeño tamaño son mucho más nutritivos que los huevos de gallina que consumimos habitualmente. Contienen más proteínas y vitaminas que los huevos de gallina y mucho más hierro y potasio. Además el consumo de huevos de codorniz no provoca alergias, por al contrario sus  proteínas  protegen nuestro sistema inmune. Por otro lado, las codornices son resistentes a la Salmonella y sus huevos no transmiten la salmonelosis, enfermedad bastante común cuando se consumen huevos de gallina.
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