Trastornos de personalidad, más frecuentes de lo que se cree

Paranoide, esquizotípico, esquizoide, narcisista, sociopático, limítrofe, histriónico, obsesivo, evitativo y dependiente.

Los Trastornos de Personalidad son un grupo de enfermedades que incluye  10 trastornos específicos, entre ellos se encuentran los trastornos de paranoide, esquizotípico, esquizoide, narcisista, sociopático, limítrofe, histriónico, obsesivo, evitativo y dependiente, sin embargo todos comparten un  conjunto de alteraciones biológicas, emocionales, conductuales, cognitivas y de relación social que generan dificultades en la adaptación y funcionalidad del individuo que las padece.  En general, los trastornos de personalidad son relativamente frecuentes en la población, sin embargo  una cifra exacta se desconoce debido a que no acuden a atención en la mayoría de los casos debido a la pobre conciencia de enfermedad y al estigma relacionado, explicó  María Rosa Hernández Miranda, psiquiatra de la Clínica Psiquiátrica Dr. Everardo Neumann Peña. Las personas con estas enfermedades tienen patrones de conducta y pensamientos que permanecen estables desde la adolescencia hasta la adultez; dicho patrón se muestra inflexible y se extiende a muchas situaciones y áreas de la vida del paciente. Dado que gran parte de dichos comportamientos anormales son egosintónicos, es decir el sujeto pareciera estar de acuerdo y conforme con su forma de personalidad, la instalación o inicio de tratamiento suele ser tardío ya que el afectado no alcanza a percibir una limitación en sus actividades de la vida diaria aunque su entorno indique lo contrario. Este comportamiento puede suponer estilos de afrontamiento desadaptativos, que pueden conducir a problemas personales y otros trastornos comórbidos, tales como trastornos de ansiedad, trastornos depresivos, consumo de sustancias licitas e ilícitas, conductas suicidas, entre otros, destacó la especialista. La proporción entre hombres y mujeres es diferente para cada tipo de trastorno de personalidad específico, por ejemplo para el trastorno límite de la personalidad se considera más frecuente en mujeres que en hombres y el trastorno sociopático más frecuente en hombres que en mujeres, sin embargo muchas investigaciones suponen que  la relación no es tan diferente sino que se debe a diferencias en la expresión de los mismos. Dadas estas circunstancias, el tratamiento es complejo, delicado y costoso, informó María Rosa Hernández Miranda. Como sucede con este tipo de  trastornos el diagnóstico se realiza la mayoría de las ocasiones hasta la edad adulta, cuando las características propias de la forma de ser de los sujetos se han consolidado; no obstante, puede haber indicios desde la adolescencia. Aunque cada vez se conoce más del funcionamiento cerebral y de algunas implicaciones neurobiológicas y genéticas de estos trastornos, el diagnóstico sigue siendo puramente clínico, a través de entrevistas estructuradas y de una historia clínica detallada de su forma de pensar, actuar y de relacionarse, dirigida en la medida de lo posible a los pacientes y a las personas cercanas, y de la observación de ciertas características que puedan orientar sobre los síntomas antes mencionados. Para su tratamiento no existe fármaco específico, no obstante la base es una psicoterapia formal y sistematizada, realizada por profesionales con experiencia. Se llegan a usar medicamentos para controlar algunos síntomas, pero no están diseñados para tratar la esencia del problema, para eso la importancia de la psicoterapia a mediano y largo plazo, remarcó. Por tratarse de una condición crónica que afecta la personalidad, la mejoría es variable y depende del paciente, del tipo de psicoterapia, de la intensidad de los síntomas y de la red social de apoyo, siempre enfocándose en la persona como un individuo con una condición patológica y no meramente manipulatoria. Así, se debe tener un enfoque multidisciplinario para trabajar con el paciente en psicoterapia y con psicofármacos, la pareja y  la familia para brindarles herramientas que ayuden a enfrentar manifestaciones propias de la enfermedad, finalizó señalando la Dra. María Rosa Hernández Miranda, Médico Psiquiatra de la Clínica Psiquiátrica Dr. Everardo Neumann Peña.Fuente: planoinformativo

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