Revista Salud y Bienestar
Un estudio realizado por un equipo de físicos, ingenieros y expertos en ciencia de materiales del Hospital Infantil de Boston y el Instituto de Tecnología de Masachusetss ha combinado células de músculos cardíacos con pequeños nanocables de oro, de 30 nanómetros de grosor, para crear innovadores parches cardíacos, cuyas células laten al unísono, lo que podría ayudar a reparar el corazón de pacientes que han sufrido un infarto. El corazón es una pieza eléctrica bastante sofisticada es fundamental que todas las células latan a la vez o el tejido no funcionará adecuadamente. Según reseñan los investigadores en la revista Nature Nanotechnology, los experimentos revelaron que la adición de las finísimas hebras de oro al tejido cardíaco cultivado en el laboratorio favorece la comunicación entre células, de manera que se contraen a la vez, sin necesidad de estimularlas en cada latido. Es importante destacar que, además de las repercusiones del trabajo en el tratamiento de enfermedades cardiovasculares, los investigadores sugieren que la nueva tecnología podría suponer un salto en la ingeniería de tejidos.