Tratamiento para periodontitis – Enfermedad periodontal (Encias)

Después de la caries dental, la enfermedad de las encías es la segunda enfermedad más común en todo el mundo. En el mundo afecta al 30-50% de la población, siendo el 10% gravemente afectado. Este artículo le ayudará a reconocer la condición y entender cómo tratarla.

La gente gasta grandes cantidades de dinero cada año en odontología cosmética para mejorar la apariencia de su sonrisa, y la mayoría de la gente desea mantener sus propios dientes durante el mayor tiempo posible. Todo el mundo es consciente del peligro de la caries dental y la necesidad de mantener la higiene bucal, pero mucho menos gente sabe que la enfermedad de las encías es la principal causa de pérdida de dientes en personas mayores de 30 años.

¿Qué es la periodontitis?

La periodontitis es una enfermedad de las encías y los tejidos que rodean y sostienen los dientes. El nombre deriva del latín donde "peri" significa alrededor, "odont" significa diente, e "itis" significa inflamación. El peridoncio incluye las encías, el hueso alveolar alrededor del diente y el ligamento del tejido conectivo que sostiene el diente en su receptáculo.

El ligamento también actúa como un cojín entre el diente y el hueso. Periodontis por lo general comienza con una infección de las encías llamadas gingivitis. Si esto no se trata, la infección ataca las fibras y el ligamento que sostiene el diente en la mandíbula, causando inflamación y destrucción progresiva del hueso alveolar alrededor del diente que lo ancla en su lugar. Esto es ahora periodontitis o enfermedad periodontal. A menudo las encías retroceden, exponiendo las superficies radiculares, y los dientes serán más sensibles al calor y al frío. La pérdida progresiva del hueso puede conducir al aflojamiento de los dientes y su pérdida eventual.

¿Qué causa la periodontitis?

La periodontitis o enfermedad periodontal es causada por una acumulación de placa dental. La placa es una sustancia pegajosa y bacteriana que se forma en los dientes, particularmente alrededor de la línea de las encías. Proviene de bacterias que se encuentran naturalmente en la boca, y en pequeñas cantidades es incoloro y bastante inofensivo. Sin embargo, cuando se acumula alrededor del margen de la goma, las bacterias producen toxinas y ácidos que irritan las encías y la placa se convierte en un depósito blanquecino suave que es claramente visible. Esto provoca gingivitis o sangrado de las encías. Si esto no se trata la placa se endurece para formar cálculo utilizando los iones de calcio de la saliva en la boca.

El cálculo no se elimina con el cepillado o el hilo dental y es un sitio ideal para que las bacterias invadan los tejidos de las encías. La placa se moverá eventualmente debajo de la línea de la goma donde las bacterias dañinas se multiplican rápidamente en el ambiente y prosperan en la abertura entre el diente y la goma. Las bacterias y las toxinas que segregan a continuación, comienzan a dañar la encía, el ligamento que une el diente y el soporte óseo del diente, con el tiempo llevando a aflojar el diente.

En algunos casos, la inflamación causada por las bacterias puede hacer que el cuerpo en sí mismo ayude a la descomposición y destrucción del ligamento periodontal y el hueso de la toma de dientes. Esta respuesta está determinada principalmente por la genética y también el estado del sistema inmune de un individuo.

Algunas personas tienen mucho más riesgo de desarrollar periodontitis que otras. Aunque la causa principal es la placa dental, algunas personas son genéticamente más susceptibles a la periodontitis en desarrollo. Varias enfermedades y enfermedades médicas, como la diabetes, el síndrome de Down, las enfermedades del corazón, la presión arterial alta, el estrés, el embarazo, ciertos medicamentos (pastillas anticonvulsivas y anticonceptivas) y hábitos de estilo de vida como fumar, pueden reducir la capacidad del sistema inmunológico para superar la infección de las encías y aumentar la susceptibilidad a la periodontitis.

Los síntomas de la periodontitis

A menudo hay poco o ningún dolor involucrado con la enfermedad de las encías en las primeras etapas, por lo que muchas personas no saben que lo tienen hasta que la enfermedad ha progresado significativamente. Por lo tanto, es importante comprobar si hay síntomas y hacerse exámenes dentales regulares.

Los síntomas de la enfermedad de las encías incluyen:

• Gomas que sangran durante el cepillado de dientes, el hilo dental o morder alimentos duros
• Gomas que son rojas, hinchadas o tiernas
• Mal aliento persistente (halitosis)
• Gusto metálico en la boca
• Gomas retrocediendo lejos de los dientes
• Cambios en su mordida
• Cambios en el ajuste de una prótesis parcial
• Dientes sueltos o dientes separados

Si sus encías sangran cuando se cepilla los dientes, no lo ignore simplemente porque no hay dolor involucrado, ya que es muy probable un signo temprano de periodontitis.

Tratamiento y prevención

En las primeras etapas de la peridontitis, el tratamiento consiste en el escalado no quirúrgico y el cepillado radicular. Esto implica limpiar debajo de la línea de las encías con un instrumento llamado cureta para eliminar la placa, el cálculo y el tejido blando inflamado alrededor del diente. La planificación de raíces suaviza los puntos ásperos donde las bacterias se acumularán en la raíz del diente. La superficie lisa y limpia ayuda a las encías a volver a unirse al diente. En las primeras etapas esto puede ser todo lo necesario, siempre que se siga una excelente higiene oral en casa. El objetivo es eliminar las colonias bacterianas para que la goma ya no se inflame y encoja lo suficiente como para eliminar la brecha o el bolsillo entre la goma y el diente para que las bacterias no pueden crecer allí.

En los casos más avanzados, donde los bolsillos alrededor de los dientes son profundos, se requiere cirugía. Puede realizarse un procedimiento de solapa, en el que el tejido de la encía se separa de los dientes y se elimina todo cálculo, tártaro y tejido inflamado subyacente. Las encías se reemplazan y se cosen en su lugar para que se ajusten perfectamente alrededor de los dientes. La curación dura de una a tres semanas y habrá alguna molestia. Los injertos de tejido blando se utilizan a veces para rellenar los lugares donde las encías se han retirado, y los injertos de hueso se puede utilizar para reemplazar el hueso destruido por la periodontitis. El tratamiento también puede incluir el uso de antibióticos para reducir la inflamación de las encías.

La prevención de la periodontitis se logra mejor mediante una combinación de buena higiene bucal diaria y visitas dentales regulares. Cepíllese los dientes al menos dos veces al día con un cepillo de dientes suave para evitar daños en el esmalte dental. Al cepillar, intente dirigir las cerdas del cepillo de dientes debajo de la línea de la goma para interrumpir el crecimiento bacteriano allí, y asegúrese de limpiar detrás de sus dientes posteriores. El uso diario del hilo dental, la limpieza de la lengua y el uso de enjuagues bucales pueden reducir la acumulación de placa dental.

Visite a un dentista cada tres a seis meses, para que pueda controlar su salud de las encías y limpiar y escalar los dientes para eliminar cualquier acumulación de cálculo y luego aplicar fluoruro para ayudar a prevenir la caries dental y la sensibilidad. Recuerde que la prevención es siempre mejor que la cura, y sin la higiene oral diaria, no se puede detener la periodontitis.