Revista Coaching

Tú eres para mí

Por Soniavaliente @soniavaliente_

Comprar bikinis siempre le ha dado un perezón… Porque requiere mucho tiempo. Los precios de un bikini de temporada le parecen absolutamente inaceptables pero un bikini barato nunca es una opción. Lucir palmito en la playa es la forma de desnudez más socialmente aceptada que conoce. Así que acojona.

 Los probadores tampoco ayudan. Una se ve a sí misma, reflejada cruelmente como es. Sin tapujos. Y ahí esta ella, blanca como la pared, a un par de kilos de ser carne de bañador, viéndoselo todo. La verdad más descarnada, gracias a esa iluminación cenital, horrible, que dan ganas de confesar y todo. ¿Dónde están los espejos trucados cuando se les necesita?

Por eso le encantan las segundas rebajas porque son un reto en sí mismo: encontrar el bikini ideal a mitad de precio. Las nuevas tiendas, tipo Calzedonia, tampoco ayudan. Una se ve obligada a elegir un top y una braguita. Con o sin aros, con relleno o sin relleno, tanga, brasileña, o modelo madre. Eso, sin contar que deben ser ambos de la talla de una y combinar entre sí. Hay algo en este tipo de tiendas que le hace desconfiar. No sabe si está en una tienda de lencería o en el Foster Hollywood. Finalmente, acaba llevándose cuatro piezas intercambiables todas ellas entre sí.

Tú eres para mí

Como buena romántica, ella siempre ha mantenido que las rebajas son como el amor. Una nunca sabe lo que va a encontrar. Una acude buscando una falda y sale con un paraguas. De temporada. Y así. Pero es su paraguas. Nadie había reparado en él. Y ella lo ha rescatado. Porque lo supo ver. Y ahora vive en su casa.

Siempre hay una pieza para cada cual, aunque no se anduviera buscando. Pero esa lógica se incumple en la tienda de bikinis. Porque no hay un conjunto, perfecto, cerrado, ideal, listo para ser descubierto por una mujer en concreto, todas las piezas son combinables entre sí. Y sí, formal y técnicamente serán un bikini exclusivo, y probablemente nadie llevará esa exacta combinación, pero el no tener la certeza que ese bikini fue fabricado tal cual, y que existe un abanico de posibilidades inabarcable, le genera un desazón inimaginable. Simplemente, porque le desmonta su teoría de las rebajas, la de tú eres para mí. Sí, lo sabe. Es así de rarita.


Volver a la Portada de Logo Paperblog