Además estos pichones tuvieron la gran fortuna de nacer en una propiedad privada estando al resguardo de los malnacidos que se dedican a robar a estas aves para comercializarlas después. En este día en particular los amigos fueron invitados por el dueño de la propiedad para poder acercarse al nido y obtener estas únicas imágenes en el momento en el que los padres se fueron del lugar a buscar mas alimento, no fueron mas de dos minutos en cercanías del nido, y cuando las tomas ya estaban aseguradas en la memoria de las cámaras Javier y Nico abandonaron el lugar para dejar que la naturaleza siga su curso.





