Twitter no puede ser considerado como dato sociológico fiable, básicamente porque no representa ni cuantitativa ni cualitativamente una muestra socio económica y demográfica contrastada. No hay usuarios suficientes (3 millones de cuentas, que no usuarios) y no hay datos reales de los mismos. Por lo que Twitter es sólo eso, Twitter y lo que ocurre allí, sólo representa a los que allí están.
Sin embargo, los medios tradicionales utilizan Twitter como fuente de información de la realidad y se hacen eco de lo que allí se dice, como reflejo de la actualidad. Mientras tanto, los apasionados de Twitter creen que ese poder de la información y la conversación en manos de los ciudadanos, representa una nueva realidad porque ahora ya no son las empresas editoras quienes deciden de qué se habla.
¿Es cierto todo eso? Algo hay, pero si atendemos a los datos fríos estadísticos, la aplastante realidad es otra: Los españoles, por muchas alternativas culturales e informativas de las que dispongamos, seguimos interesados en lo mismo de siempre: el fútbol.
Audiencia de Prensa: Marca, a años luz del resto.

Audiencia de TV: Partidos de la selección, récords de espectadores.

Audiencia de Twitter: Tras Alejandro Sanz y David Bisbal, todo futbolistas. Hay que llegar al 17º para encontrar a iFilosofía y Muy Interesante. (Se cuelan entre medias Enrique Iglesias y Rafa Nadal).

Tal vez, las redes sociales y los nuevos medios cambien la sociedad y los gustos, pero de momento, reflejan lo mismo de siempre. Lo que ya es un dato.