UCL 2012/13 (V): Shakhtar Donetsk ya no sorprende

Como ya viene siendo habitual, a continuación repasamos en detalle lo más destacado de la quinta jornada de la Uefa Champions League acercándote las Notas. No dejes de repasarlas.

Barcelona, dominando pero sufriendo:

Disfrutando del balón y la iniciativa, el Barcelona transformó su encuentro ante el Celtic escocés en un autentico monólogo pero como en reiteradas oportunidades le ha sucedido jugando en el Camp Nou tuvo muchísimas dificultades para traducir en la red el incontestable dominio que ejerció sobre el campo.

Encontrando en el cuadro conducido por Neil Lennon a un rival sumamente aplicado al momento de proteger su área, el Barça echó en falta mayor claridad en los metros cercanos al arco y fue un conjunto sumamente previsible, que al filtrar pases y combinar con acierto sólo de forma esporádica sufrió mucho para gestar opciones claras.

Si en medio de dicho marco de complejidad logró quedarse con los tres puntos fue porque en ningún momento del juego perdió la inigualable paciencia que lo define como conjunto, la cual hizo que no se desesperara cuando se encontró inesperadamente en desventaja y le permitió lograr el gol que acabó con la paridad en la última jugada.

Roberto Soldado, al rescate:

Venciendo en condición de visitante a un BATE Borisov que llegaba al encuentro confiado y en alza, el Valencia consiguió la victoria que necesitaba para terminar de confirmar la recuperación que inicio hace tres semanas ante el Lille y logró colocarse en una posición favorable para clasificarse de cara a las últimas tres jornadas de esta fase de grupos.

Sobreponiéndose a una media hora inicial en la que necesitó de Diego Alves para no sufrir goles en contra, el conjunto dirigido por Mauricio Pellegrino se valió de su oportunismo para convertir y mejorando notablemente en el segundo tiempo construyó una victoria que contrariamente a lo esperado le terminó resultando cómoda.

El que destacándose por encima del resto firmó la misma fue Roberto Soldado, quien haciendo gala de sus movimientos y su capacidad para usufructuar cada una de las chances con las que cuenta marcó los tres goles, el primero de ellos rentabilizando un penal que él mismo provocó. Su noche resultó mágica.

El Shakhtar ya no sorprende:

Exhibiéndose dominante y contundente, el Shakhtar Donetsk redujo a la mínima expresión nada más ni nada menos que al actual poseedor de la corona y dio nuevas muestras de ser un equipo que aúna un convencimiento absoluto y que aunque aún vive pendiente de dar un salto europeo definitivo no se asusta ante los grandes desafíos.

Estirando el invicto del que disfruta desde que comenzó la temporada, el once minero aprovechó muy bien su ventaja tempranera y salvo en lapsos muy puntuales del juego asedió de forma continuada el arco defendido por Petr Cech desarrollando muy bien su fútbol, construido como otras tantas veces en base a precisión y velocidad.

Como no podía ser de otra manera, los goles con los que el equipo abrió y cerró la cuenta llegaron mediante aportaciones sencillamente fabulosas de Luiz Adriano, William, Alex Teixeira y Fernandinho, los primeros a la hora de asistir y los segundos a la de finalizar, los cuatro futbolistas brasileños que últimamente conforman la alineación titular.

Manchester United, acostumbrado a remontar:

Encontrando soluciones de la mano de Javier “Chicharito” Hernández, el Manchester United dejó al Sporting Braga sin tres puntos que por un momentos parecieron estar asegurados y como en este mismo certamen lo hizo la pasada jornada ante el Cluj logró revertir una desventaja inicial por sexta vez en lo que va de la campaña.

Debido a desaciertos defensivos que lamentablemente viene siendo costumbre, el conjunto comandado por ir Alex Ferguson recibió dos goles firmados por Alan en los primeros veinte minutos de juego y se vio obligado a realizar un esfuerzo descomunal para evitar la derrota, algo que fue capaz de lograr porque en momentos de asombro e incredulidad tuvo la suerte de encontrar el descuento muy rápidamente.

Dicho tanto le permitió recuperar la confianza al equipo, que en los minutos restantes del primer tiempo y en todo el complemento lució suelto y fue en busca de la remontada demostrando mucha ambición, lo que hizo que las ocasiones de gol se sucedan y el conjunto portugués no resista demasiado tiempo defendiendo la ventaja que sorpresivamente había conseguido.