Siguiendo con nuestra costumbre, a continuación repasamos en detalle lo sucedido en la octava jornada de la Uefa Champions League acercándote las Notas. No dejes de repasarlas.
Barcelona, otra vez castigado por la practicidad:
De visita a un estadio vestido de gala y envuelto en mística, el Barcelona vio renacer estigmas que en el pasado lo hicieron vivir momentos dolorosos y difíciles de digerir y de forma tan injusta como inesperada sufrió su primera derrota en el certamen al caer ante un Celtic escocés que firmó una gesta épica.
En el marco de un encuentro que transcurridos unos minutos iniciales sujetos a paridad dominó de principio a fin teniendo prácticamente todo el tiempo el balón, el cuadro blaugrana no tuvo la efectividad necesaria para convertir las ocasiones claras que con mucho ingenio gestó y lo pagó sufriendo efectos devastadores producto de la enorme practicidad de la que el cuadro comandado por Neeil Lennon volvió a hacer gala.
Como hace dos semanas atrás lo hizo en el Camp Nou, el Celtic logró la ventaja en su primera aproximación y luego asumió por completo su inferioridad retrasando sus líneas y dedicándose sólo a ocupar espacios en los alrededores de su área y defender, en lo que fue un accionar que acompañado por otro tanto que llegó sobre el cierre y por el que hizo muchos menos méritos aún le resultó sumamente redituable pese a no impedir que sufriera.
El Chelsea nada lo perdona:
Exhibiendo un nivel que nuevamente fue bastante discreto, el ultimo campeón del torneo no logró imponer el dominio que seguramente esperaba para hacer padecer al Shakhtar Donetsk en su visita a Londres pero valiéndose de errores que no perdonó demostró que es capaz de sumar de a tres aun envuelto en dificultades.
Con Fernando Torres activo pero Juan Mata, Eden Hazard y Oscar alterando participaciones positivas y negativas, el equipo conducido por Roberto Di Matteo no disfrutó de muy buenos momentos con el balón en su poder y como en Ucrania fue superado en grandes pasajes por el elenco minero, que teniendo en Fernandinho a su guía y en William a su principal arma de desequilibrio se desenvolvió con mayor prolijidad y se insinuó siempre más peligroso.
Con el encuentro transcurriendo bajo dicho marco de situación, la victoria del cuadro londinense se construyó de la mano de los errores del arquero Andriy Pyatov, quien fallando al momento de despejar permitió los tantos de Torres y Oscar. Con William igualando rápido luego de ambos goles, el castigo llegó sobre el final por obra y gracia de Victor Moses.
Juventus dio al fin el presente:
Dando cuenta de un poderío que aún no había podido demostrar, la Juventus sacó provecho de las debilidades que como era de esperarse presentó el modesto Nordsjaelland danés y sumando por primera vez una victoria en el certamen luego de encadenar tres empates logró reacomodarse mejor en su grupo con vistas a las últimas dos jornadas.
Dando el fin el presente como equipo fuerte, el último ganador del Calcio se quitó los nervios gracias a un tanto rápido de Claudio Marchisio y posteriormente usufructuó muy bien la poca presencia de su rival, sin respuestas dada su falta de recursos, para imponer una supremacía que le permitió terminar firmando una brillante y a su vez necesaria goleada.
Construida en poco más de media hora de juego, la misma vino acompañada de rendimientos nuevamente altos de Andrea Pirlo y Arturo Vidal y participaciones decisivas de Mauricio Isla por el sector derecho como así también de confirmaciones como las de Kwadwo Asamoah y Sebastian Giovinco, quienes luciendo bien acoplados vienen completando actuaciones sumamente positivas para el conjunto las veces que participan.
Claudio Pizarro, como en los viejos tiempos:
Disfrutando de la titularidad por segunda vez en lo que va del certamen, el peruano Claudio Pizarro rememoró tiempos en los que daba cuenta de su enorme poder rematador haciendo estallar al estadio Olímpico de Munich y condujo al Bayern hacia una cómoda victoria frente al Lille despachándose con un descomunal y al mismo tiempo histórico Hat Trick.
Siendo el mejor brazo ejecutor de un conjunto alemán que desarrollando muy bien su fútbol y dándole forma a un autentico asedio resolvió el encuentro con sencillez y contundencia, el ex futbolista del Werder Bremen se adueñó de absolutamente todas las miradas convirtiendo en un lapso de tiempo de apenas quince minutos el segundo, el cuarto y el quinto dejando ver su habitual elegancia en la definición.
Hace mucho que no marcaba tres goles en la primera mitad, por eso me alegro mucho. El que hemos jugado ha sido fútbol del bueno. Espero que podamos seguir ganando así.”
En lo que ha sido el tercer Hat Trick más rápido en toda la historia de Uefa Champions League, la particularidad radica en que cada uno de los goles pasó a tener una trascendencia importante en la historia del club bávaro, ya que el primero fue el número 500 del equipo en este certamen, el segundo el 750 en competiciones europeas y el tercero el 300 jugando en casa también en el ámbito internacional. Difícil que se de una jornada más redonda.
Manchester United, de la mano de una ráfaga:
Sacando a relucir toda la estirpe que lo define como conjunto, el Manchester United repitió lo que en la jornada anterior hizo en Old Trafford valiéndose de una ráfaga completamente electrisante y nuevamente dejó sin nada a un Sporting Braga que demostrando otra vez sus armas volvió a presentársele como un rival competitivo y sumó más merecimientos.
El elenco dirigido por Sir Alex Ferguson tuvo el balón pero en muchos momentos no supo como utilizarlo en su beneficio, déficit que lo volvió un equipo sin profundidad y lo hizo convivir con enormes dificultades al momento de crear oportunidades de gol, algo que el Braga logró hacer siendo más práctico de la mano de Eder y Alan, nuevamente verdugo.
Transcurrido un corte de luz que se arregló muy rápidamente, la soluciones aparecieron mágicamente cuando el tiempo comenzaba a agotarse y la derrota parecía otra vez segura gracias a tres inesperados golpes asestados por Robin Van Persie, Wayne Ronney y Javier “Chicharito” Hernández en los últimos diez minutos. Bastó con eso y sirvió para que la clasificación quede asegurada.