“EVOLUCIÓN EN UCRANIA: Año II de la generación Maidan
La plaza de la Independencia en Kiev recuerda a los más de 100 caídos en los días calientes de la revolución contra el gobierno de Viktor Yanukovich
- Centenares de voluntarios siguen recaudando dinero para sufragar los gastos de la guerra que aún se libra en el este del país
que iluminan los homenajes a los más de 100 muertos y desaparecidos durante las protestas, al mismo tiempo que numerosos voluntarios piden dinero a todo aquel que se acerca a la plaza para financiar a las tropas en el este.
"Nadie se esperaba que la revolución pudiera acabar en esta guerra"afirma Maria Yemets, de 22 años. Yemets es una de las personas que conforma la plataforma Ukraine Crisis Media Center, organismo creado a finales de la revolución como instrumento de contrapropaganda para informar de lo que sucede en el país en más de siete idiomas, entre ellos el español. Yemets vivió en su época de estudiante los momentos más tensos de la revolución. "Mi vida se dividía entre la Universidad y el Maidan. Si no hubieran atacado a los estudiantes la revolución no hubiera comenzado". Según un estudio del 'Center for Civil Liberties', el 70% de las personas que participaron en este
movimiento se unieron por la represión de los 'berkuts' (fuerzas policiales especiales) hacia los manifestantes que se encontraban en la plaza el 29 de noviembre de 2013, una semana más tarde que el anterior presidente Viktor Yanukovich decidiera, para la sorpresa de muchos, no firmar el pacto de anexión a la UE. Para Vasyl Karpiuk, joven de 28 años originario de Ivano-Frakivsk (oeste de Ucrania) todo cambió el 29 de noviembre: "La gente ya no sólo se manifestaba por Europa. Nos levantamos contra la dictadura de Yanukovich y todo lo que ella significaba: Corrupción, injusticia,...". Anatoliy Karabadgak, soldado de 28 años perteneciente a la Guardia Nacional, coincide con el resumen de Karpiu y añade que los ataques del 29 supusieron una ofensa a la dignidad del país y que como respuesta "la gente salió a las calles para defenderla".
"En Maidan había gente de todos los orígenes e ideologías, la extrema derecha incluida" afirma Igor Perestreyak, estudiante de 27 años de Kiev. "He llegado a escuchar que Maidan fue un movimiento
organizado por nazis, pero solo hay que leer las reivindicaciones de Maidan para darse cuenta que no tiene nada que ver" sentencia Perestreyak.
En plena revolución surgió la llamada Generación Maidan, integrada por jóvenes nacidos en los años finales de la Unión Soviética, que fueron testigos de la Revolución Naranja del 2005 y que colaboraron activamente en las revueltas de 2013. A día de hoy, muchos participan en numerosos organismos por la transparencia política del país (como Chesno) por un mayor control dentro del gobierno o Dostup do Pravda (Acceso a la verdad)donde los ciudadanos tienen derecho a exigir informaciones públicassobre, por ejemplo, el uso de los fondos públicos.Desde el fin de las protestas, el 22 de febrero de 2014,se han reavivado los debates en torno al nacionalismo y la Independencia. Alexandre Kononov de 29 años originario de Jersón (sur de Ucrania, muy
cercano de Crimea) da su opinión sobre el término nacionalista. Para él no tiene la misma definición que en Europa "Lo que en Ucrania llamamos nacionalistaen Europa es un patriota y un patriota no tiene por qué ser un nazi".
La influencia rusa continuó siendo muy fuerte en los años posteriores a la Independencia, a través de presidentes que habían tenido grandes responsabilidades durante la época soviética como fueron Leonid Kravchuk o Leonid Kuchma. Para Perestreyak, Ucrania ha vivido una transición hasta Maidan "Ahora la gente joven es más consciente y está mejor preparada para crear un verdadero sistema democrático. Hay buenas ideas y pese a que no haya medios hay interés en crear una política verdadera, cada vez hay más cultura política entre los jóvenes".Toda Generación Maidan, cuyo perfil medio de edad se encuentra entre los 25 y 30 años, encara un presente y un futuro inestable e incierto donde la guerra en el estecontinúa abierta y a plena intensidad”(De “El Mundo”)…
Precisamente cuando en España se cumplen treinta y cinco años de aquel llamado “golpe de estado” del 23 de Febrero de 1981, calendas de apenas iniciada la transición democrática cuando un grupo de militares del “antiguo estilo” y bastante “desnortados” organizó la toma del Congreso de los Diputados en plena sesión de investidura de un presidente del gobierno (al fin sería investido Leopoldo Calvo-Sotelo); sí, muchos años más tarde, casi coincide aquello del 23F con el aniversario de los acontecimientos que en Kiev, Ucrania, se produjeron en la Plaza de la Independencia (en la llamada en ucraniano “Maidan Nezalechnosty”), que dieron lugar a lo que se ha denominado “espíritu Maidan”. En esos dos años, cabe afirmarlo, aquel pronunciamiento que algunos han llamado “revolución” ha venido a ser más bien el detonante de una época ardua y compleja para el bello país del Dniéper.Por encima de los recuerdos, de las exaltaciones patrióticas y de la extirpación de las tendencias absolutistas al más puro estilo de la Rusia post-soviética, la realidad es que Ucrania ha ido sumiéndose poco a poco en una gran crisis económica, siempre demasiado lejos de la “tierra
prometida” que fue la Unión Europea, y la guerra sigue devorando a los jóvenes y no tan jóvenes y propiciando un éxodo grande de personas hacia el extranjero, para evitar ser llamados a filas.
La guerra continúa en el este de Ucrania, en los oblast Donetsk y Luganks, los tan próximos a Rusia como que éste reivindica casi como propios. Y en el escenario de las confrontaciones bélicas, el frente apenas si se altera, aunque las vidas de los combatientes van cayendo como fruta madura, mientras la comunidad internacional y la Unión Europea, que se parecían ofrecerse como “protectoras”, han mirado hacia otra parte, silenciando las antaño protestas y represalias por la ocupación de Crimea y la permanente invasión de efectivos militares rusos. Sí, la paz de “Maidán” ha estallado cual carcasa de fuegos artificiales, llevándose por delante mientras tanto un avión malasio derribado por un misil de fabricación rusa que desde luego no fue disparado
por los angelitos del cielo, sino más bien , por lo que casi se da por seguro, por los rusos o pro-rusos de las zonas ocupadas.
Y esa paz “estallada” ha sumido a Crimea en unos niveles de pobreza y escasez, hasta de aislamiento, que sirven para que su población siga sufriendo estrecheces de toda índole, hasta las de las dificultades de desplazamiento y asistencias elementales, por el aislamiento de Ucrania. (Una conocida mía cuya madre vive en Evpatoria, Crimea, se gasta un dineral cada vez que ha de visitarla, volando desde España hasta Moscú, y desde allí a Crimea, sufriendo controles y problemas ingratos)Bien sé que hay algunos defensores acérrimos de la grandeza de Rusia y del buen hacer de su “zar” Putin, alguno de ellos apreciado seguidor de este blog, pero aunque les pese o disientan, la realidad indudable es que Rusia ha hecho lo que le ha dado la gana, en buena parte porque Occidente y la Unión Europea una vez más han sido tan ambiguos y egoístas como acostumbran, dando apoyos “de boca”, sin ayudas ostensible. Se me dirá que Ucrania necesita una total renovación en sus estructuras sociales y comerciales y económicas. Cierto. Pero para ello se requiere unos ánimos externos que no se ven por ninguna parte. Al final, el actual presidente, Poroshenko, sigue continuando la saga de oligarcas millonarios que dicen actuar para bien del pueblo y más bien parece que sacian sus ansias de poder y de dinero. En este caso, mucho chocolate, que es lo que fabrica
una de las empresas de Poroshenko (Roshen) y poca efectividad.
Hago votos porque de una vez, esa juventud que pareció aportar savia nueva a la vida del país, se sustraiga a la sangría de la guerra y aporte nuevas ideas y nuevos estilos a un país que, como Ucrania, fue la cuna de la gran cultura eslava del este y rusa.“Las revoluciones las hacen hombres de carne y hueso, no santos, y todas terminan por crear una nueva casta privilegiada”.- Carlos Fuentes (1929-2012) Periodista y escritor mexicano.SALVADOR DE PEDRO BUENDÍA