Como es sabido, la Bioética es la Ética de la Vida, es por tanto una ciencia interdisciplinar que estudia el conjunto de condiciones que exige una gestión responsable de la vida humana. Estos días estamos asistiendo a un acontecimiento, en el que muchísimas personas y el gobierno chileno han volcado todas sus energías para gestionar el salvamento de vidas humanas.
El rescate de los 33 mineros atrapados en la mina San José de Chile constituye todo un canto a la vida. Cuando escribo esto, se está acelerando el rescate y ahora parece que sólo tardan 40 minutos en el ascenso de cada minero. Después de los primeros chequeos, ya se tienen los primeros informes médicos. La verdad es que todo ha sido una epopeya para salvar a 33 personas. Ojalá este mismo movimiento de solidaridad se mantenga siempre presente en todas las peleas por la vida humana.
Copio un párrafo de una carta de un chileno: " Durante la extensa y emocionante tarea de rescate de los 33 mineros, los chilenos no han perdido de vista que detrás de esos dolores y trabajos, sólo Uno podía terminar bien la faena. Los mineros han invocado a Dios, sus familias han pedido a Dios, los rescatistas se han encomendado a Dios, las autoridades han confiado en Dios, los simples espectadores vamos dando gracias a Dios. Unánime: los chilenos de todas las religiones -mayoritariamente cristianos, fundamentalmente católicos- hemos pedido el suplemento divino a nuestros esfuerzos humanos". Todo un testimonio de meter a Dios en sus vidas.
Dejo aquí un vídeo que recoge el ambiente que se ha vivido en Copiapó, de los familiares, amigos y pobladores de la zona, en estos últimos días.