Magazine

Un ciclo económico refleja también una estructura de preferencias

Publicado el 30 mayo 2023 por Alejandro Tena

Cuando leemos o escuchamos en las noticias que la inflación está muy alta, o si el tipo de cambio bajó o que el desempleo está alto, nos ponemos a pensar sobre la situación económica, en general, y sobre cómo afectará a nuestros propios negocios, en particular. Cuando a nosotros mismos nos están afectando los altos precios que nuestros proveedores nos están poniendo, no queda la menor duda que nuestra rentabilidad ya se vió mermada aunque hayamos mantenido nuestros volúmenes de venta y precios, después vendrán decisiones acerca de mantener o no los precios a nuestros clientes. 

No olvidemos que la inflación es macro

La inflación, posiblemente, el más importante de los indicadores para las empresas, es un indicador macroeconómico, y es una  medida muy general sobre el estado de la economía y por lo tanto pueden ser más o menos representativos en unas u otras situaciones particulares, hay que ser especialmente cuidadoso con el manejo de estos indicadores si en nuestro negocio particular y en su cadena directa no hay indicios que refleje la evolución de la inflación que se proyecta nivel macro y esto lo tenemos que considerar desde el momento en que se anuncian las posibilidades de una inflación. 

Para lo anterior, es preciso que conozcamos bien la estructura de nuestra actividad económica. 

Una buena oportunidad para conocer a nuestros clientes

Estamos acostumbrados a pensar de que si aumentamos el precio de nuestros productos, entonces, perderemos clientes y más si, adicionalmente, tenemos una impresión negativa del panorama económico, en general. Esto puede ser, notiriamente, obvio si nos encontramos en sectores que no producen bienes de primera necesidad, como los alimentos, pero hasta en esta categoría hay matices. 

La primera pregunta que nos deberíamos hacer es si los productos de nuestra empresa son prescindibles, y más importante aún, ¿De qué se componen nuestros productos?, no técnicamente, sino en cuanto a cuestiones de valor, y por tanto, esto nos lleva a preguntarnos, ¿Qué elementos de nuestros productos son más prescindibles que otros?. Lo anterior, no significa, necesariamente, retirar elementos de nuestros productos sino que se puede pensar en sustituirlos por otros más baratos. 

La importancia de la segmentacion

Sustituir algun elemento de nuestros productos por otro que es más barato y que es, claramente perceptible por el consumidor trae numerosos riesgos, sobretodo, si nos encontramos en mercados donde el comprador tiene más fuerza que el vendedor, ya que significa que puede cambiarse fácilmente, y peor aún donde los productos que vendemos pueden ser prescindidos, por lo menos, en una primera instancia. 

Segmentar implica conocer bien y a profundidad; no todos nuestros clientes tendrán las mismas actitudes frente a nuestra marca, ni habrán sufrido con la misma intensidad los efectos de la inflación, ni tienen las mismas expectativas futuras sobre la situación económica, y esto último es especialmente importante si ya hay una base de clientes con una alta varianza en cuanto edades, ingreso, etc.. 

Es a partir de esas diferencias con las que podemos diseñar estrategias para mantener o incluso mejorar nuestra rentabilidad, incrementando o manteniendo la satisfacción de cada uno de ellos. 

Buen momento para descubrir nuevos mercados

Alguna vez, hace ya muchos años, escuché que en chino, la palabra crisis se usa también para designar una oportunidad, no se si esta afirmación sea cierta, pero no importa, porque para el propósito de este apartado es irrelevante. 

La inflación es una medida del poder adquisitivo a través del tiempo, más no, indispensablemente, significa una medida de cualidad de vida; claramente, hace 30 o 40 años era mucho más accesible hacerse de una casa y un auto, pero de ninguna forma, era posible hacernos de la cantidad y calidad de información con la que contamos ahora. ¿Qué es más importante, una casa y un auto, o más información?, pues está pregunta llevaría la de limitación de tantos temas y tantos grupos de personas que cuando este mes preparados para el análisis, ojo, el análisis, ya habría sido irrelevante. Es imperativo reconocer que este mundo fue formado por nosotros mismos y con nuestro consentimiento, de nadie más. 

Si estamos en crisis, es porque hay algo que debemos cambiar, es porque nos podemos encontrar frente a la enorme oportunidad de cubrir ese vacío que está a consencia de nuestra estructura económica, deficiente, o, simplemente, desgastada. No sigfica ponerse tampoco en el rol de superhereo cuando nuestra situación y recursos no lo permiten, pero sí que podemos aportar nuestro grano de arena en la nueva corriente que podemos ver venir. 

Nuevas aplicaciones para nuestros productos, nuevos mercados, nuevos productos para nuestro mercado, nuevos mercados para nuevos productos. El cuadro BCG, no sólo útil en momentos de crisis internas sino también macroeconómicas. 

Líneas de investigación

Se antoja muy interesante preguntarse cuántas Pymes siguen la evolución del ciclo económico y de estas que lo siguen cuántas se conforman con actuar en consecuencia, sin mayor proactividad y luego comparar sus diferencias en cuanto a tamaño y rentabilidad unos años después. Evidentemente, no todas las empresas que actuaron prácticamente tendrán resultados similares a lo largo de sus sectores y capacidades, empero, será que las que actuaron proactivamente tendran mejores resultados que sus pares similares en tamaño y sector. 


También podría interesarte :

Volver a la Portada de Logo Paperblog

Quizás te interesen los siguientes artículos :