Cuando tras la espectacular pelea con Thor, Hulk cae a tierra firme desde la base aérea de Shield, pasan unos minutos antes de que el personaje reaparezca en pantalla. Lo hace como Bruce Banner, dentro de lo que parece una nave industrial abandonada. Por suerte, un curioso tipo está allí para darle conversación y ofrecerle unos trapos con los que tapar su cuerpo desnudo. El tipo en cuestión no es otro que Harry Dean Stanton.
Sin duda resulta curiosa y me llevé una buena sorpresa al ver aparecer en ese momento al singular actor en un breve cameo. Con una larga lista de películas a sus espaldas, que no les voy a recitar, siempre interpretó papeles secundarios pero sobresalientes en todo tipo de producciones cinematográficas, ya fueran independientes o cintas de estudio de gran presupuesto. Sus personajes, aparte de carácter, rezumaban un aura melancólica, remarcada por la delgadez y fragilidad física que siempre ha demostradoo este actor. El papel más destacado, como protagonista, lo consiguió de la mano de Wim Wenders en la película París Texas, un clásico del cine. El crítico Roger Ebert declaró: “ninguna película con Harry Dean Stanton o M. Emmet Walsh como actores de reparto puede ser mala del todo“. El propio Ebert más tarde admitió que Dream a Little Dream (1989), en donde aparece Stanton, fue una “clara violación” a esta regla.
En la premiere americana de Los Vengadores vimos a Stanton pasar por la alfombra roja vestido desaliñadamente, con una bufanda raída y una vieja chaqueta estilo militar de puños desgastados. Sin duda un atuendo de ejercito de salvación que destacaba frente a los caros trajes del resto del reparto. Y es que a Stanton se la suda todo, si me permiten la expresión. ¿Y qué pinta en esta gran producción superheróica? Cedamos la palabra a Joss Whedon, su director:
“Seamus [McGarvey], nuestro director de fotografía, en esos momentos se encontraba filmando un documental sobre Harry Dean y pasaba mucho tiempo con él, y se me metió en la cabeza que tener a Harry Dean Stanton sería la leche. Y así se me ocurrió escribir esa extraña y breve escena, y cuando lo hice no fue tan breve ya que ocupó unas 12 páginas y me dije, oh, esto es genial. Bruce Banner cae en una película de los hermanos Coen, y el hecho es que incluso me permitieron dejar ese concepto y cuando interpretó el papel Harry Dean todo fue muy emocionante. La idea era ponerlo en una situación un poco surrealista con alguien que claramente no tenía ningún problema con lo que era, sólo para hacer una pequeña transición sin exprimirla demasiado. Y ya de paso, ya sabes, para trabajar con Harry Dean y poder preguntarle por Alien y Missouri, lo que es un privilegio”.
Y así, con esta serie de casualidades, Harry Dean Staton suma una nueva película a su filmografía. Y una muy buena, que no es poco.