No necesitas dar más. Ya sé que la cosa está muy fastidiada por aquí, que todos andamos a ramal y media manta que no sobran los euros. No te voy a poner imágenes impactantes de la tragedia para ablandar tu corazón, que podría que para eso el blog es mío, pero no quiero que sientas que debes ser el gran benefactor de nadie, simplemente quiero que por un momento pienses que eres un grano de arena de una playa. Pequeño, diminuto, insignificante como tu euro; pero sin ti, la playa no estará completa, no será una playa en toda la extensión de la palabra, así que eres necesario, eres vital.
No, no me vengas con que es muy complicado por internet. Eres especialista en dar la brasa al sobrino friki ó al amiguito de tu nieto para que te enseñe cómo poner el Youtube en la barra de favoritos. Esto es mucho más fácil, te lo aseguro y si necesitas ayuda pídela, ellos la están suplicando.
Para que veas que te lo pongo fácil, ahí tienes las cuentas bancarias, para que mañana sin falta te acerques al banco a ingresarlo.
Esta gente necesita tu Euro. Ya, ya sé que te queda la duda de si la ayuda llegará a su destino, si será bien invertida ó si acabará en las manos del menos indicado, te entiendo pero también te gastas un euro en chucherías que generarán grasas en tu cuerpo que luego tendrás que quemar en el gimnasio pagando ó entras en el chino y te compras una bolsa de gomas para el pelo y la impresentable de tu compañera de trabajo va y te dice que están hechas de preservativos usados y tú, estupefacta, le dices que no puede ser, que está loca y ella se ríe y te dice que claro que no…pero tu disimuladamente tiras la maldita bolsa de gomas porque sabes que ya no te las podrás poner en el pelo y te acuerdas de los muertos de la imbécil de tu compañera.
Entiendo que tu familia y tus hijos son lo primero; lo sé, a mí me pasa igual, he tenido que hacer un máster y un doctorado en economía casera de forma acelerada para no tener que mirar al gato y verle posibilidades de conejo al ajillo, pero estoy segura que si les preguntas a ellos, a tus hijos, al gato déjalo tranquilo…por ahora, te dirán que están dispuestos a dar un euro para los que lo han perdido todo y necesitan ayuda para seguir adelante. Pregúntales, por favor.
¿Perdón, qué me dices? Ah sí sí, por supuesto aquí mismo en nuestra ciudad, en nuestro barrio, quizás en nuestra escalera tenemos gente necesitada también. Personas a las que podemos ayudar sin irnos tan lejos. Tienes toda la razón. En cuanto dones el Euro para Filipinas, corre a ayudar a tu vecino necesitado, te lo agradecerá siempre.
Y ahora viene la parte más difícil de todas, como el euro ya lo habéis dado pero es una porquería de donativo, hay que compartir la idea con todos aquellos que nos rodean, hay que convencer a los más que se pueda que su euro es importante y mucho.
No podemos hacer nada por los miles de muertos, pero tenemos la obligación de hacer algo por los millones de vivos. Gracias a todos por leerlo y ahora quiero verlo compartido en todas las redes sociales.
Podéis encontrar enlaces para aportar vuestro granito de arena en El Mundo.