El hotel Hostal Spa Empúries brinda un fin de año exquisito en uno de los parajes más sugerentes de la Costa Brava
Gastronomía tradicional y diversión se aúnan para invitar al visitante a vivir una velada mágica y empezar 2016 de la manera más agradable.
La oferta incluye un paquete especial de escapada de fin de año que incluye cena, celebración con barra libre, alojamiento y brunch el 1 de enero.
El hotel Hostal Spa Empúries de l´Escala ofrece una propuesta inmejorable para despedir el 2015 y dar la bienvenida al nuevo año en uno de los entornos más sugerentes de la Costa Brava. Gastronomía tradicional y celebración se aúnan para invitar al visitante a vivir una velada mágica y empezar 2016 de la manera más agradable.
Así pues, el hotel Hostal Spa Empúries pone a disposición de los clientes una oferta variada para pasar el fin de año disfrutando de unos platos que combinan los productos típicos del lugar con una creación gastronómica de corte vanguardista. Sin ir más lejos, el Menú gastronómico Villa Teresita incluye delicias culinarias como la sardina ahumada con velo de tocino y praliné de frutos secos, ostras al cava sobre royale de puerros con picatostes de hinojo, gamba al vapor de cúrcuma, salpicón de bogavante azul, calamar de potera estofado, ñame y trufa, el pichón a la royale y postres como el bombón de chocolate con jengibre.
Por otra parte, también se puede disfrutar del Buffet frío y caliente en Bistró del Mar, que contiene platos para picar como el surtido de panes ecológicos, jamón ibérico Maldonado, patés, quesos, camarones o mejillones; entrantes compuestos, entre otros, por bombones de bacalao y tartar de verduras con vinagreta de trufa, sándwich de langostinos con lima y huevos de arenque, cebiche de de pescado azul con fruta de la pasión, Tatin de pimientos a la brasa con anchoas ahumadas, Pastrami de pato con mahonesa de cilantro y cebolla frita, salpicón nórdico de pulpo de Llançà con pan especiado; en cuanto a los postres destacan exquisiteces tales como la piña flambeada con yogurt y maría luisa, y el canelón de miel y requesón Sacher.
Asimismo, para todos aquellos que deseen disfrutar de la noche inaugural del 2016, el hotel Hostal Spa Empúries ha preparado un paquete especial de escapada de fin de año que incluye cena, celebración con barra libre, alojamiento y menú brunch el 1 de enero.
Por último, y acorde con las tradiciones navideñas, el Hostal dispone, entre los días 23 de diciembre y 5 de enero, de platos típicos catalanes de la época de estas celebraciones como, por ejemplo, la clásica escudella catalana y carn d´olla, los canelones o el inconfundible “platillo” ampurdanés de pollo con escamarlanes.
Situación y entorno
El hotel Hostal Spa Empúries se encuentra situado en una de las calas más bellas y mágicas de la Costa Brava. Rodeado sólo por la naturaleza, sin ningún tipo de edificaciones alrededor, el “Hostal” es el único salvaguarda de la playa del Portitxol, una de las más bonitas de todo el litoral catalán, así como de las ruinas del primer asentamiento greco-romano de la península ibérica, un legado digno de ser visitado. Una ubicación privilegiada para un hotel comprometido con los valores de la sostenibilidad y la solidaridad. Un hotel que actúa como autentico embajador y protector del entorno donde se emplaza, ofreciendo una estancia memorable a sus huéspedes así como un intercambio justo con la naturaleza. Un refugio conectado con el histórico Camino de Ronda, pasaje que perfila la costa de norte a sur y cuyo recorrido es idóneo para pasear mientras se contemplan las distintas calas y playas de la bella y dispar costa del Empordà.
Oferta Gastronómica
La filosofía de la cocina del Hostal Spa Empúries se basa en la trazabilidad: el control de la calidad del producto en todo el proceso, desde su origen hasta que llega al plato. La elección de materias primas se efectúa bajo criterios de absoluta temporalidad y cercanía sin renunciar a la excelencia de los alimentos. Para ello cuentan con el reconocido chef Rafa Peña, propietario del restaurante Gresca de Barcelona y ganador en 2008 del premio al cocinero joven del año (otorgado por la Academia Catalana de Gastronomía).
La máxima expresión de su gastronomía se ve reflejada en el Restaurante Villa Teresita, una agradable sala con magníficas vistas a la playa del Portitxol y que, sin duda alguna, representa una degustación rica y equilibrada que despierta todos los sentidos, relaja al organismo y es saludable y nutricional a la vez que apetecible y sabroso. Algunos de sus platos más representativos son la escórpora frita (cabracho frito), el arroz de congrio y la torrija elaborada a base de trigo xeixa.
Además, el “Hostal” ofrece tapas y platos divertidos en la terraza el Bistró de Mar, un restaurante cuya carta mantiene el espíritu de la carta de Peña pero con un carácter más informal y dinámico. El Bistró de Mar también goza de espectaculares vistas al mediterráneo.