Un fin de semana de furia en México

No hay salvación posible para México. El país se desangra al ritmo que marcan los narcos. Asesinatos, ajustes de cuentas, sangre derramada sobre el asfalto, muertos y más muertos… ¡Estos es México, Cabrones! Los narcos son los amos de un país que marcha a la deriva por mucha lucha que intente impulsar Felipe Calderón desde el gobierno. Hace tiempo que se perdieron las riendas del país centroamericano; hoy cuna del narco y de los asesinos con gatillo fácil.

El sábado 69 personas acabaron en el depósito de cadáveres en alguna de las provincias donde los narcos se han hecho fuertes. En los 11 días que llevamos de 2010 se han contabilizado 301 homicidios- la mayoría vinculados con el tráfico de drogas. 28 muertes diarias, asusta la cifra sólo con verla. El sábado 9 de enero de 2010 quedará grabado en la mente de todos los mexicanos como un día de furia en un país donde los narcos dictan las leyes a golpe de tiro en la nuca. El anterior récord estaba en 57 muertos- 17 de agosto de 2009. El domingo sólo cayeron 18… Un buen día. Siempre es un buen día cuando no se alcanza la media de homicidios.

México y los mexicanos no pueden más. Con 7.724 homicidios registrados en 2009- según publica el periódico Universal- no hay victoria posible contra el terror narco. Precisamente el diario mexicano abre con un editorial donde habla de una ola apocalíptica en la lucha contra el narco. “El año 2010 será un año más violento que el anterior. Para este año se espera que aumente más [la violencia], puesto que está por entrar un periodo electoral. En palabras del Gobernador Reyes Baeza “Que ningún ciudadano aspire a que regrese la paz, mientras que un grupo no extermine al otro”. Entendido, pero, ¿de cuántos miles de “exterminados” más estamos hablando? ¿Cinco mil, 10 mil, 50 mil? Y en esa cifra de “exterminados”, ¿se cuenta a los civiles, a los periodistas, o esas cifras se suman aparte? Y, bueno, sólo por preguntar: ¿De verdad esa es la estrategia: que se exterminen unos a otros? Y, bueno, sólo por preguntar: ¿De verdad esa es la estrategia: que se exterminen unos a otros?”

Rotundas las palabras del Universal. Pero reales como la violencia que atenaza a los mexicanos. ¿Hasta cuándo van a seguir llenando las morgues de cadáveres los narcos? ¿Y si no se exterminan los unos a los otros? Hablar de guerra puede parecer un poco apocalíptico y tendencioso pero con casi 8.000 muertos en 12 meses hablar de ‘problema’ quizás se quede demasiado corto.

Sinaloa, Chihuahua, Durango, México Distrito Federal, México Guerrero y Baja California son feudos inexpugnables de los narcos y donde ocurren más del 90% de los asesinatos, ajustes de cuentas, secuestros y desapariciones. El Gobierno contraataca con espectaculares acciones policiales destinadas a descabezar los cárteles. Pero a rey muerto rey puesto… La guerra por el control de la droga se ha descontrolado y la mejor prueba la encontramos en la archifamosa Ciudad Juárez. El sábado recogieron un total de 26 muertos que estaban desperdigados por la ciudad fronteriza con Estados Unidos.

Juárez está considerada como la ciudad más peligrosa y violenta de México. Sólo en 2009, 2.635 personas fueron asesinadas en este enclave estratégico para el paso de mercancías, personas y drogas a Estados Unidos. El 34% del total de homicidios violentos ocurridos en el país azteca se produjeron en esta ciudad donde el gobierno tiene desplegados hasta 8.000 efectivos.

Desde el 1 de diciembre de 2006 México ha llorado 16.000 veces. Demasiadas para un país. Demasiadas cruces. Demasiadas tumbas… Demasiadas muertes estúpidas y sin sentido en una guerra que no tiene fin.