Los gatos son generalmente percibidos como independientes, pero también son capaces de mostrar lealtad eterna, una cualidad que suele ser característica de los perros. Probando el punto es este pobre gato ruso que ha estado esperando a sus propietarios durante más de un año en el lugar exacto donde lo abandonaron.
El gato fue fotografiado por primera vez sentado en una cubierta de alcantarilla en la ciudad de Belgorod, en el verano de 2015, por un hombre llamado Ostap Zadunayski. Entonces notó al gato sentado en el mismo lugar día tras día, y curioso por saber más sobre este comportamiento inusual, pidió a los residentes locales más información.
Fue entonces cuando descubrió que los dueños de los gatos vivían cerca, pero vendieron su apartamento el año pasado y se mudaron, dejando a la pobre criatura. Los testigos le dijeron a Ostap que en realidad vieron al gato correr tras el auto mientras los dueños se alejaban. Desde entonces, ha estado esperando pacientemente en el mismo lugar para su regreso, viviendo de la comida que le ofrecen los lugareños.
"Este es un gran ejemplo de mezquindad humana y verdadera lealtad animal", dijo Ostap, al tiempo que alaba a los lugareños por su amabilidad.
Ostap publicó fotografías en el sitio web de redes sociales ruso VKontakte, comparando la difícil situación del gato con la historia destructiva de Greyfriars Bobby, un perro famoso en Edimburgo en el siglo XIX por custodiar la tumba de su propietario durante 14 largos años.El triste gatito nos recordó al legendario Hachiko, el japonés Akita Inu que pasó años esperando a su maestro muerto, y cuya conmovedora historia finalmente salvó a su raza de la extinción.
Odditycentral