Un novedoso fármaco que puede regenerar células de la médula espinal podría servir para revertir los estados de tetraplejia, de acuerdo al último ensayo llevado a cabo por el neurocientífico Michael Fehlings y en la que se han servido de casi 50 personas.
Durante el estudio, el dato que más llama la atención es el del 66% de pacientes que padecían lesiones cervicales y que después del tratamiento recuperaron parte de su capacidad motora.
La investigación se ha basado principalmente en la utilización de la proteína B-210, comercializada en Estados Unidos como “Cethrin” y creada por científicos de la Universidad de Montreal.
Según las palabras del propio Fehlings, “los resultados son realmente esperanzadores”, y podrían suponer un cambio radical a la terapia que se les aplica a pacientes paralizados como causa de accidentes de carretera o percances deportivos.
El fármaco usado en el estudio posee una proteína que, después de ser inyectada por medio de cirugía, es capaz de bloquear a la molécula conocida como “Rho” e impide que las células deterioradas por traumas puedan regenerarse.
El experimento fue llevado a cabo entre los años 2005 y 2007, siguiendo la evolución de los pacientes a lo largo de un año. El experto neurocientífico señala el caso de un sujeto afectado por parálisis severa y que después del primer año recuperó el uso de sus manos e incluso había empezado a caminar con un poco de ayuda externa.
De la misma forma, otros pacientes con traumas en el tórax no mostraron un nivel alto de recuperación, pero sí que se observaron cambios muy significativos en las afectaciones cervicales.
Ahora será preciso esperar al próximo paso, consistente en estudiar una muestra más grande de afectados con un riguroso protocolo, y es que de momento, las propiedades del fármaco ya se han demostrado para un grupo reducido de pacientes. “Lo que interesa” – señala Fehlings – “es poder comprobar estos resultados favorables con un gran número de pacientes”.