La mayoría de nosotros vivimos en un mundo de grandes velocidades, poco tiempo y mucho por hacer. El estrés está a la orden del día, en nuestras tareas, obligaciones y prisas.Los niños, nos guste o no, viven también estresados. No sólo porque les exigimos continuamente que se adapten al mundo de los adultos, también por los aprendizajes que deben hacer, por las nuevas situaciones, conflictos y frustraciones a las que se enfrentan, por el estado de ánimo de sus padres,…Todo esto les genera muchas emociones, siendo el enfado y la rabia una de las que más aparecen.
El enfado de los niños, en todos sus niveles, nos molesta. No lo toleramos. Muchas veces nos enfadamos también y gritamos, o les sermoneamos, o intentamos distraerlos con alguna otra cosa. En pocas palabras, les pedimos de formas más o menos sutiles, que NO expresen esa emoción, que la repriman.
Pero el enfado no desaparece.
La rabia no expresada la van acumulando hasta que un día, explota o aparece enmascarada con síntomas inesperados (no hablan, no comen, se arrancan el pelo, muerden,…).Es importante que aceptemos los sentimientos de nuestros hijos y les permitamos expresarlos. Para eso, este libro mágico es un gran aliado. El cojín de Martina Repentina es un recurso educativo excelente para liberar emociones en días veloces y enfadados.La caja de Martina consiste en un cuento que viene acompañado con un cojín muy especial, que nos ofrece una manera adecuada y sana para expresar la rabia. ¿Quieres uno? Luego te cuento cómo puedes conseguirlo, pero déjame que te presente antes a su creadora.
Cuando me escribió para presentarme su proyecto, enseguida me cautivó, pues como madre y profesional de la educación sé que es importantísimo ofrecer a los niños recursos para que aprendan a canalizar y autogestionar sus emociones. Le he pedido a Ester que nos cuente...
10 curiosidades sobre ella y su proyecto:(1) He vivido dos maternidades que han despertado en mí un gran cambio de conciencia.(2)Llevo tiempo formándome, leyendo, aplicando la atención plena y transformando para eliminar todo aquello que significa educar desde el autoritarismo. (3) Soy una gran transitadora del mundo de las ideas. Lo comparo con la observación de las estrellas, de las miles que brillan sólo una se convierte en fugaz y baja para ser materializada. “El cojín de Martina Repentina”, es una de éstas que ha conseguido bajar. Qué gozada sería poder crear al mismo ritmo que trabaja el pensamiento!!!(4) Viví una lactancia cargada de una creatividad e inspiración especiales. Ya sabiendo esto, cada vez que daba teta me llevaba mi blog, y en el blog ha quedado mi cielo reflejado, por si no vuelvo a dar pecho, tengo escasez de ideas y necesito recurrir a ideas bonitas.(5) Una tarde enfadada, en un momento en que la paciencia se desbordó, exploté a gritos. Tras la explosión: arrepentimiento, y después momento de calma, reflexión y búsqueda de soluciones junto con mi hija. Entre las dos pusimos en marcha un sistema para que no volviese a suceder. Cogimos un cojín y con un rotulador escribimos: “el cojín de los gritos”, para gritar cada vez que lo necesitáramos pero sin herirnos mutuamente; aquí empezó a gestarse “El cojín de Martina Repentina”.(6) Para poder materializar este proyecto he necesitado y agradezco el apoyo de todas las personas que aportaron toma de tierra y que compartieron vuelo conmigo. (7) En el parque conocí a Sefelinda Mustache, la ilustradora que ha dado trazo y color a Martina. Martina nació junto al bebé de Sefelinda siendo compañeros de gestación.(8) Hace un tiempo acudí a los cursos que impartía Laura Díaz de Entresotos sobre Educación Consciente, siendo una de las herramientas más importantes que he adquirido. Recientemente, Laura, ha aportado al proyecto de Martina una guía para “Acompañar a nuestros peques en días veloces y enfadados”. (Puedes descargarte esta guía si te suscribes a la Newsletter de Naniero Ediciones. Por cierto, te hablé de esta psicóloga, que yo particularmente admiro también, aquí).(9) Mientras tanto cuido del bosque, me regalo plantas, leo cuentos, dejo que mis hijas me lleven a su mundo, las acompaño y ellas a mí… Y aunque poco tiempo me queda para bailar, comer saludable, viajar y dar paseos por el monte, me encanta!!! (10) El cojín de Martina es un recordatorio para toda la familia, su presencia en el sofá de casa recuerda en todo momento que los gritos ya no pueden lanzarse deliberadamente.Como te decía antes, una mamá consciente y que comparte su creatividad y sus ideas en beneficio de muchas familias como la mía, o la tuya.
El cuento de Martina ha sido un éxito en casa, pues refleja de forma muy veraz el día a día que sufren la mayoría de niños y niñas, por lo que rápidamente Sunflower se ha sentido identificada. La idea de liberar sus gritos en un cojín le ha parecido de lo más natural y lo ha integrado en un tris tras, por lo que lo tenemos también en el sofá de casa bien presente. Además el cojín es precioso y puede fusionarse perfectamente en la decoración del hogar. Está elaborado en un taller de costura muy cercano al punto cero, de agradable tacto, funda serigrafiada con tintas al agua y composición 100% algodón orgánico.
El pack de "El cojín de Martina Repentina" es una edición especial que por su carácter artesanal y sostenible no entra dentro de las grandes distribuidoras, se puede conseguir a través de la web o en puntuales puntos de venta físicos.¡SORTEO!Y si quieres conseguir un pack totalmente gratis, ¡participa en el SORTEO! Para ello te pedimos:
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- 14/6/2015 14:36:45 Josefina Martínez Terrón
<<Ahora mi cuerpo se siente muchísimo mejor, el enfado se ha despegado de mis tripas y estoy tranquila, relajada, desenfadada… y con ganas de jugar, sonreír y soñar. – Martina Repentina>>
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