Ilustración artística del sistema TRAPPIST-1. Portada de la revista Nature. Crédito: NASA/JPL-Caltech.
Un equipo de astrónomos ha revelado el primer sistema que se conozca que alberga siete planetas del tamaño de la Tierra alrededor de una estrella individual (llamados TRAPPIST-1b, c, d, e, f, g y h). Tres de estos planetas se encuentran dentro de la zona habitable, el área alrededor de la estrella donde un planeta rocoso podría mantener agua en estado líquido en su superficie, algo clave para la vida como la conocemos.
Con tan solo el 8% la masa del Sol, la estrella TRAPPIST-1 es muy pequeña en términos estelares (solo 162.793 km de diámetro, frente a los 139.822 del planeta Júpiter) y, aunque está relativamente cerca de nosotros (40 años-luz), es muy tenue. Los astrónomos esperaban que este tipo de estrellas enanas pudieran albergar muchos planetas del tamaño de la Tierra en órbitas apretadas, convirtiéndolas en objetivos prometedores para la búsqueda de vida extraterrestre, pero TRAPPIST-1 es el primer sistema de este tipo descubierto.
“La emisión de energía de estrellas enanas como TRAPPIST-1 es mucho más débil que la de nuestro Sol. Para que hubiera agua en sus superficies los planetas tendrían que estar en órbitas mucho más cercanas que las que podemos ver en el Sistema Solar. Afortunadamente, parece que este tipo de configuración compacta ¡es lo que estamos viendo alrededor de TRAPPIST-1!”, indica Amaury Triaud, coautor del estudio.
No obstante, que un planeta contenga agua líquida en su superficie no depende solo de la distancia a la que se encuentra de su estrella, sino que también influyen factores como la composición atmosférica del planeta y la excentricidad de su órbita entre otros. Debido a esto, en realidad los siete planetas del sistema podrían poseer agua líquida dependiendo de las condiciones de cada uno, pero es mucho más probable encontrarla en los tres planetas de la zona habitable.
Las órbitas de los planetas de TRAPPIST-1 son mucho más pequeñas que la órbita de Mercurio en el Sistema Solar. Los planetas están tan cerca unos de otros que si una persona se parara en la superficie de uno de ellos, es posible que viera características geológicas o nubes en los planetas más cercanos, los que algunas veces podrían verse más grandes que la Luna en el cielo de la Tierra. Sin embargo, a pesar de la asombrosa cercanía entre los planetas, el pequeño tamaño de la estrella y su baja temperatura significan que la energía que proporciona a sus mundos es similar a la recibida por los planetas interiores de nuestro Sistema Solar; TRAPPIST-1c, d y f reciben cantidades similares de energía que Venus, la Tierra y Marte, respectivamente.
Los astrónomos confirmaron la existencia de los siete planetas del sistema utilizando el telescopio TRAPPIST–Sur, instalado en el Observatorio La Silla, el Very Large Telescope (VLT) en Paranal, y el Telescopio Espacial Spitzer de la NASA, así como otros telescopios alrededor del mundo.
Ilustración artística de cómo podrían verse los planetas de TRAPPIST-1, basados en los datos disponibles hasta ahora. Crédito: NASA/R. Hurt/T. Pyle.
Con base en sus densidades, se estima que todos los planetas de TRAPPIST-1 son rocosos. Observaciones adicionales del sistema no solo ayudarán a determinar si son ricos en agua, sino que también es posible que revelen si alguno podría tener agua líquida en su superficie. La masa de TRAPPIST-1h, el planeta más lejano, aún no ha sido estimada, pero los científicos creen que podría ser similar a un mundo congelado, lo que podría ser determinado con más observaciones.
“Las siete maravillas de TRAPPIST-1 son los primeros planetas del tamaño de la Tierra que han sido encontrados orbitando esta clase de estrella”, dijo Michael Gillon, autor principal del estudio e investigador principal del sondeo de exoplanetas TRAPPIST en la Universidad de Lieja en Bélgica. “También es el mejor objetivo hasta ahora para estudiar las atmósferas de mundos de tamaño terrestre potencialmente habitables”.
Ahora la pregunta no es si encontraremos un planeta con las condiciones de la Tierra, sino cuándo lo encontraremos.
El estudio “Seven temperate terrestrial planets around the nearby ultracool dwarf star TRAPPIST-1” será publicado en la edición del 23 de febrero de 2017 de la revista Nature.