Una nueva investigación sugiere que una pequeña molécula llamada TFP5 rescata placas y ovillos bloqueando una señal del cerebro hiperactiva, restaurando así la memoria en ratones con Alzheimer.
Un nuevo rayo de esperanza ha atravesado los resultados nublados asociados con la enfermedad de Alzheimer. Un nuevo informe de investigación publicado por científicos de los Institutos Nacionales de la Salud muestra que cuando una molécula llamada TFP5 se inyecta en ratones con la enfermedad que es el equivalente humano de Alzheimer, los síntomas se invierten y la memoria se restaura sin evidentes efectos secundarios tóxicos.
Según dijo Harish Pant C., Ph.D., investigador implicado en el trabajo del Laboratorio de Neuroquímica del Instituto Nacional de Trastornos, se espera que los estudios de ensayos clínicos en pacientes con enfermedad de Alzheimer puedan producir una prolongada y una mejor calidad de vida como la observada en ratones tras el tratamiento con TFP5. Por lo tanto, los investigadores sugieren que la TFP5 debería ser un compuesto terapéutico eficaz.
Para hacer este descubrimiento, los investigadores utilizaron ratones con una enfermedad considerada el equivalente de Alzheimer. Un conjunto de estos ratones fueron inyectados con la molécula TFP5, mientras que a otros se les inyectó con solución salina como placebo.
Los ratones, después de una serie de inyecciones intraperitoneales de TFP5, mostraron una reducción sustancial en los diferentes síntomas de la enfermedad junto con la restauración de la pérdida de memoria. Además, los ratones que recibieron inyecciones TFP5 no experimentaron pérdida de peso, estrés neurológico (ansiedad) o signos de toxicidad. La enfermedad en los ratones tratados con placebo, sin embargo, progresó normalmente como se esperaba.
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