Un viaje Stonehenge

Uno de los monumentos megalíticos más importantes del mundo se encuentra en la llanura de Salisbury. Hablamos de Stonehenge.
Una antigua leyenda celta cuenta que fue el mismo Merlín quien robó esas piedras a los Irlandeses y las llevó por el aire hasta su sítio actual, afirmando que quién se bañara a los pies de aquellas piedras quedaría sanado de todo mal. Sin embargo, los arqueólogos ponen fecha a su construcción: entré 3.500 y 1.100 a. C. Si Merlín estuvo ahi y también con el rey Arturo, entonces es casi eterno.

Este círculo formado por piedras megalíticas atrae cada año a miles de visitantes, y algunos son seguidores de Merlín. Aquí los antiguos sacerdotes celebraron sus ritos, protegidos de ojos extraños durante siglos.
Hay algunos que ven en Stonehenge un inmenso observatorio, ya que el eje de su estructura apunta precisamente hacia el nordeste, el lugar por donde sale el sol el 21 de junio, el día más largo del año. El astrónomo Stephen Hawking llega a la conclusión de que todas las piedras están situadas aportando rastros visuales de la salida y la puesta de sol en fechas claves, tales como los solsticios de verano y de invierno.
Hawking dedujo que Stonehenge fue un observatorio prehistórico desde el que los antiguos druidas podían predecir las fases de la luna y los eclipses. Puede que sí.