De las diez películas argentinas que participan del 70° Festival Internacional de Cine de Berlín, una es oriunda de Corrientes. Las mil y una se titula este largometraje de Clarisa Navas que transcurre en un barrio popular de esa capital provincial, y que fue elegida para inaugurar la sección Panorama de la Berlinale.
Algunos espectadores recordamos a la autora –también correntina– por su opera prima: Hoy partido a las tres ganó el premio a la Mejor Actuación de Elenco de la competencia internacional del 19° BAFICI.
Las mil y una se exhibe en la Berlinale en carácter de pre-estreno mundial; la primera función tuvo lugar ayer, mismo día en que comenzó el festival. Por ahora, el crítico más entusiasta es el argentino Diego Lerer; lo sigue de cerca Ola Salwa de Cineuropa. En Screen Daily Sarah Ward señaló más virtudes que aspectos cuestionables, al revés que Redmond Bacon en Cultured Vultures.
Navas, en plena filmación de su segundo largometraje.Navas filmó su nuevo trabajo en el barrio Mil Viviendas, donde residió antes de mudarse a la Ciudad de Buenos Aires para estudiar Artes Audiovisuales en la Universidad Nacional de las Artes. La ficción gira en torno a dos chicas que se enamoran y desde entonces deben enfrentar prejuicios propios y ajenos.
«Todo lo que aparece en esta película en algún momento existió y todavía sigue existiendo» sostiene la realizadora en la presentación escrita de Las mil y una. «El amor más grande apareció una vez, así como los mejores amigos que ayudaron a formar una pequeña resistencia queer en la periferia».
Para Navas, su film invita a pensar en «la luminosidad de los encuentros» que permiten «resistir la hostilidad» y «liberar el deseo» en la adolescencia. Las imágenes capturadas dan cuenta de «un modo de existencia disidente en el norte de la Argentina, único y singular pero siempre cercano a desaparecer».