Este sábado estuvo en Vigo mi querida y admirada Mireia Long, Co-directora junto a Azucena Caballero, de La Pedagogía Blanca.
Y vino para dar un taller sobre como Dejar de Gritar. Que simple título, verdad?
Pues sí. Un título simple pero profundo porque denota que, en esta sociedad, algo está fallando, empezando por las prisas que llevamos los adultos y derivan en una falta de paciencia y comprensión hacia nuestros pequeños.
La sociedad demanda que empecemos a comunicarnos con actitudes basadas en el respecto, la comprensión y sobre todo, la humildad de seguir unos procesos naturales. La misma actitud que empleamos para comunicarnos en las empresas, es la actitud que se merecen nuestros hijos. La misma actitud que empleamos para hablar con otros adultos es la que se necesitan nuestros niños. A nuestro jefe no le gritamos porque eso tiene consecuencias. A nuestros compañeros de trabajo no les gritamos porque no lo admitirán. A nuestra pareja no la gritamos porque no es una actitud respetuosa. Ni en público ni en privado gritamos porque es una actitud que denota mala educación. Entonces, ¿porqué gritamos a nuestros niños?
En la educación actual, llena de competitividad y falta de empatía es muy necesario tomar conciencia de que necesitamos herramientas que nos permitan ser CONSCIENTES del ritmo que llevamos y nos enseñen a recuperar el ritmo y la vida que deseamos. Si estamos tranquilos, hablamos tranquilos. Si estamos serenos, hablamos con serenidad. Si hemos tenido un buen día, vibramos con otra energía. Pero no siempre sale todo redondo. Es en ese justo momento cuando tenemos que reconocer que, nos faltan herramientas que nos enseñen a actuar en esos momentos de agobio, estrés y desesperación.
Y todas estas herramientas tan necesarias nos beneficiarán con la crianza de nuestros hijos, en nuestro hogar y en nuestros trabajos. Son herramientas reales y prácticas, enfocadas a la acción directa.
Todas esas herramientas las encontré en una FORMACIÓN que, hace más de dos años, me dio la fuerza suficiente para seguir luchando por un cambio de paradigma, tanto educativo como personal y profesional. Tanto me impactó el contenido y tanto me involucré con el cambio, que este año, en la 4ª Promoción de la Pedagogía Blanca, formo parte del maravilloso panel de EXPERTOS que la componen (aquí).
Por ello, te invito a que leas las 3 cosas que te ofrece la Formación y el Coaching Educativo de la Pedagogía Blanca (aquí), porque es muy importante asumir que no podemos desvincularnos de la educación de nuestros hijos. Todo está relacionado: nuestros hijos, nuestro hogar, nuestro trabajo. Somos personas que asumimos muchos papeles a lo largo de nuestra vida, pero el papel de la maternidad/paternidad es un papel que no podemos delegar al 100%. Como padres/madres, como mujeres/hombres, como pareja, como trabajadoras/es, son los valores de base los que nos dan la fuerza y energía necesaria para transformar lo que no nos gusta (aquí) y vivir así la vida que queremos.
Si desconoces las herramientas necesarias para desarrollar tu Plan de Vida, escríbeme a [email protected] y te cuento cómo hacerlo.