Candanchú
Esquiar en Candanchú, os aseguro que será una experiencia tanto para los más expertos como para los principiantes. Aquí nació el esquí alpino en Aragón, y eso sucedió allá por los años 20. Si, si, estamos hablando de comienzos del s. XX. Situada en pleno Valle del Tena, en el nacimiento del río Aragón a solo 2km de Francia y junto al puerto de Somport, el entorno natural asegura diversión esquiando y disfrute de fabulosos paisajes entre bosques. Confinada entre los Parques Natural de Valles Occidentales y el Parque Nacional de Ordesa y Monte Perdido, Candanchú (municipio de Aísa) empezó a funcionar como estación con los militares de Jaca. Posteriormente desde los círculos deportivos burgueses y de montaña de Zaragoza se comenzó a promocionar esta estación. A ello además contribuyó la apertura de la estación ferroviaria internacional de Canfranc, que facilitó la llegada de esquiadores franceses y españoles. A partir de ahí su evolución fue imparable, se implantaron los cursillos de esquí, y el primer remonte mecánico en los años cuarenta. Actualmente se mantiene como una estación independiente de la estructura de Aramon, lo que le confiere un carácter más familiar y acogedor, aunque por otro lado dificulta su impulso económico.
Nada más llegar, toda la zona de la derecha de la estación, Pista Grande, está preparada para principiantes. Pistas cortas, con poca pendientes y con arrastres. Aquí además están los alquileres y cafeterías. En el margen izquierdo del valle se encuentran pistas para aquellos más avanzados como Tobazo, Rinconada, Tuca y la mítica Zapatilla. Todas ellas forman un dominio esquiable de 50km, a los que se suman los tres circuitos de esquí nórdico. Estos circuitos están en la zona de la Rinconada y atraviesan un entorno natural agradable y de gran atractivo. Sorpresa! Aquí está la única instalación en España para practicar el Biathlon! El pico de la estación está en Tuca Blanca con 2.400m. Una lástima que ese día debido al mal tiempo los remontes estaban cerrados hasta los picos.Ciudadela de Jaca
Después de un día de esquí, llega el momento más esperado y deseado, quitarse las botas… ah, que descanso… Ahora toca un poco de turismo, y en el caso de Candanchú a 30 minutos se encuentra la localidad de Jaca.
Visitar Jaca, la capital de la comarca de La Jacetania, es adentrarse en una de las ciudades con más historia y que se remonta a más de 2.000 años. Principalmente por motivos militares, debido a su situación en el paso desde Francia y el Camino de Santiago, Jaca adquirió una importancia crucial en la defensa del territorio. Primero la muralla y posteriormente la Ciudadela con su castillo interior fueron claves en la defensa de la villa y las incursiones desde Europa. Además sus fuerzas militares jugaron un papel crucial en la proclamación de la Segunda República.Otros puntos de interés, además de la Ciudadela, son el Monasterio de Santa Cruz, la Catedral de San Pedro, las ermitas y el barrio de la judería. Pero sobre todo, pasead por el casco viejo. Aquí podéis disfrutar de buena comida, tapas y pinchos de calidad acompañados de buenos vinos, en tascas y bares, sin olvidar los excelentes restaurantes en los que degustar los ricos y contundentes platos aragoneses.
Monasterio S. Juan de Peña
Centro Interpretación
Una excursión que podéis hacer en el día desde Jaca es visitar el Monasterio de San Juan de Peña, situado en la localidad de Santa Cruz de la Serós, en el entorno natural del Monte Oroel. Este monasterio, una joya del románico, cuenta con un panteón en el que hay enterrados varios de los reyes de Aragón. Además está sito en la ruta del Camino de Santiago. Os sorprenderá que se encuentra literalmente debajo de la montaña, en una cueva, y sus orígenes datan del s. X, con variadas leyendas. En el s. XVII debido a un incendio se construyó el nuevo monasterio en la pradera del Llano de San Indalecio. Podéis llegar caminando por un sendero desde el monasterio viejo. Con formas simétricas y consecutivas, su iglesia posee abundante decoración y las figuras de tres santos, San Juan Bautista (patrón de Aragón), San Indalecio y San Benito. Este monasterio estaba en un estado lamentable debido a su abandono en el s. XIX hasta que fue rehabilitado por el Gobierno de Aragón y actualmente aloja el Centro de Interpretación del Reino de Aragón así como una Hospedería (categoría de cuatro estrellas). Aquí os remontaréis a la edad media y como era la vida en el monasterio con diversas recreaciones de situaciones y labores cotidianas. También podréis conocer la historia y raíces del Reino y Corona de Aragón. Las entradas van de los 6€ a 12€ y hay visitas guiadas.
S
iguiendo la carretera N-240 de vuelta a Jaca pasáis por el pueblo de Santa Cruz de la Serós. Este pueblo del altoaragón ha sabido conservar las construcciones típicas y detalles propios de la región. Os recomiendo dar un paseo por sus calles, incluso podéis acariciar y dar de comer a unos burros, al menos nosotros pudimos ese día!Y como no para comer, que mira que se come bien en Aragón, os recomiendo el bar/restaurante O’Fogaril. El cocinero, al que ya le viene de familia, tiene un toque especial. Las cocina a la brasa (ternasco, perdiz, conejo) y las migas, son los platos más representativos y os aseguro que lo tienen merecido. Podéis escoger el ambiente que más os apetezca, con terraza descubierta, comedor cerrado y acristalado, o el comedor interior con fogaril. Eso si, llamad para reservar ya que los fines de semana se llena ya que no hay muchas mesas.
Acércate a los animales
Y así terminaron nuestros días por la Jacetania, donde además de divertirnos en la nieve, disfrutamos del entorno natural de montaña del pirineo, conocimos parte de nuestra historia y degustamos la cocina aragonesa. Sin duda, una escapada para repetir!