Se encontraba posada en la varilla de un alambrado junto a otra de su especie, bien al descampado. Sabiendo que si me aproximaba caminando muy despacio hacia ella podría tomar unas fotos comencé a caminar en dirección contraria al sol para que el ave no me viera bien contra el destello solar además de tener mejor ángulo de iluminación. Pude tomar las primeras fotos a más de una decena de metros mientras se rascaba hasta llegar a unos 5 metros, distancia de su tolerancia máxima a mi nivel de altura, seguramente si la golondrina hubiera estado sobre un lugar más elevado podría haber llegado más cerca de ella.







