Como dice un amigo... " Es bueno estar al pedo y vagando...hace bien al espíritu; a veces las pequeñas cosas que dan satisfacción, las dejamos pasar sin darnos cuenta. De vez en cuando, es bueno tomarse un respiro y disfrutar las cosas lindas".
Como hoy a la tarde estaba al pedo y quería tomarme un respiro, me subí al auto y me fuí a la boca del Arroyo Apepú para despedir este viernes pajareando un rato, tuve que esquivar algunos caballos cuando llegué al lugar y ni bien estacioné en el camino nuevo observé algo negro volando sobre los tallos sobresalientes del pasto; cerré el auto y me puse en la ardua tarea de acortar distancia entre el pájaro y yo para fotografiarlo; miré con el prismático y me dije... " No me vuelvo a casa sin una buena foto del Pico de plata".
La última vez que vi a un macho de esta especie fue en Julio del 2011, en este mismo lugar había fotografiado a la hembra de esta especie el año pasado y hoy tuve la grata sorpresa de encontrarme con el macho; no saqué muchas fotos ya que únicamente me concentré en cumplir el objetivo propuesto y una vez que logré determinar los lugares en donde se movían elegí uno y me senté a esperar, por suerte siempre encuentro alguna piedra que me sirve de utilidad para descansar en los momentos de espera. Tras varios intentos infructuosos pude al fin cumplir lo que me había propuesto, logrando estar a menos de 5 metros de esta belleza; disfruten de las fotos.
Estos fueron algunos de los intentos previos.
Así lo encontré cuando me bajé del auto.