En esencia, la nueva ley afirma que los sistemas naturales complejos evolucionan hacia estados con más patrones, diversidad y complejidad.
En otras palabras, la evolución no se limita a la vida en la Tierra, sino que también ocurre en otros sistemas enormemente complejos, desde planetas y estrellas hasta átomos, minerales y otras estructuras del universo.
El trabajo, firmado por científicos del Instituto Carnegie, el Instituto Tecnológico de California (Caltech) y la Universidad de Cornell, junto a filósofos de la Universidad de Colorado (todos en EE UU), ha sido financiado por la Fundación John Templeton.
En general, las leyes "macroscópicas" de la naturaleza describen y explican fenómenos observados y experimentados a diario en el mundo natural. Leyes naturales relacionadas con las fuerzas y el movimiento, la gravedad, el electromagnetismo y la energía, por ejemplo, se describieron hace más de 150 años.
Tres características
La nueva propuesta añade otra ley macroscópica que reconoce la evolución como un rasgo común de los sistemas complejos del mundo natural, con tres características fundamentales. Por una parte, estos sistemas están formados por muchos componentes distintos, como átomos, moléculas o células, que pueden ordenarse y reorganizarse repetidamente.
Por otra, están sometidos a procesos naturales que hacen que se formen innumerables disposiciones diferentes. Y, tercero, solo una pequeña fracción de todas estas configuraciones sobrevive en un proceso llamado "selección para la función". Independientemente de que el sistema sea vivo o no, cuando una configuración novedosa funciona bien y mejora la función, se produce la evolución.
La denominada "Ley de la información funcional creciente", como la han bautizado sus autores, afirma que el sistema evolucionará "si muchas configuraciones diferentes del sistema se someten a selección para una o más funciones".
"Un componente importante de esta ley natural propuesta es esa idea de selección por función", subraya el primer autor, Michael L. Wong, astrobiólogo de Carnegie.
Evolución en todas partes
"El universo genera combinaciones novedosas de átomos, moléculas, células, etc. -continúa-; y aquellas combinaciones que sean estables y puedan seguir engendrando aún más novedades seguirán evolucionando. Esto es lo que hace de la vida el ejemplo más llamativo de evolución, pero la evolución está en todas partes".
Las leyes de la naturaleza, como las de movimiento, gravedad, electromagnetismo, termodinámica, etc., codifican el comportamiento general de diversos sistemas naturales macroscópicos a través del espacio y el tiempo.
Y ahora, según los autores, su "ley de la información funcional creciente", complementa la 2ª ley de la termodinámica, que establece que la entropía (desorden) de un sistema aislado aumenta con el tiempo, con el calor siempre fluyendo de los objetos más calientes a los más fríos.
La comunidad científica estudiará y debatirá ahora el alcance de esta nueva propuesta, para confirmar si realmente se ha encontrado una ley que faltaba sobre la naturaleza.