Me refiero a la escuela más antigua de piano, aquella que sólo usa la articulación de dedo para ejecutar, que no tiene en cuenta ni la muñeca, ni el antebrazo, ni el brazo...
Estamos hablando de Kalkbrenner y su famoso "guiamanos" (una barra paralela al teclado en la que apoyar las muñecas y no separarse, mantener una posición cuasirobótica, lo más fija posible... la antigua escuela de "la peseta", de "la moneda", colocada sobre el dorso de la mano y tocar de manera que nunca caiga)...
La escuela de Logier, de Stamaty... del Dactilion, de los gimnasios para dedos que tanto daño hicieron. Recordemos que Schumann se atrofió un dedo (ahí quedó su famosa Tocatta para atestiguar el tipo de trabajo técnico que realizó)..
Y tenemos una prueba sonora apabullante, un vestigio, un resto sonoro de otras épocas... Se trata de la grabación en rollo de pianola de Saint-Saëns en la que interpreta a Beethoven. Escuchadla!
Una manera de tocar perteneciente ya al pasado casi, con una igualdad de sonido sorprendente, con una agilidad casi sobrenatural, una manera de tocar muy "a la francesa", muy digital, muy articulatoria... Pretender tocar música en el piano sin hacer uso del peso tiene estos resultados, velocidad sin alma, sólo sonidos "perlé" sin profundidad, un estilo clásico para unos instrumentos que requieren otro tipo de acercamiento... Ahí quedan los restos del pasado. Gracias por acompañarme a este viaje por el tiempo.