Un generador lineal oculto en la base de una silla mecedora + una persona meciéndose placenteramente = 15 vatios de potencia, suficientes para una bombilla de bajo consumo, la que está iluminando su lectura mientras se balancea.
Este espectacular diseño pertenece a un joven ucraniano, Igor Gitelstain, residente en Israel. La Mecedora Otarky es su proyecto final en la Escuela Shenkar de Ingeniería, Diseño y Arte en Israel, y le ha ganado publicidad y reconocimiento cuando apenas comienza su carrera. No es el único gadget original que ha salido de su imaginación, pero es el que más nos interesa por su mezcla de mueble minimalista y generador de energía limpia.
igorgitelstain.me
El nombre de la mecedora también es de por sí un principio económico: Otarky, por autarky, autarquía. La autosuficiencia como respuesta a la falta de medios, al aislamiento y a la precariedad. Gitelstain arrancó con un estudio académico sobre cómo viven en sociedades anti-tecnológicas, como la amish o los judíos ortodoxos. Por contraposición, nuestra sociedad moderna, adicta a la tecnología y dependiente de la energía en inconmensurables cantidades. Extremos tan radicales se cruzaron en su mente y dieron luz a este invento sencillo: la aparente sencillez de descubrimientos tan obvios como indispensables. Hace falta una mente diferente para concretar la existencia de algo así.
igorgitelstain.me
Crear electricidad de la nada, de donde no la había. Resolver problemas de la vida diaria y hacerlo de forma amigable con el medio ambiente. En una de las bases de la silla, una toma de corriente, un enchufe: con 15 vatios se puede cargar la batería de un móvil, una Tablet, un portátil… es suficiente para mantener vivo cualquiera de estos pequeños aparatos sin los cuales ya no sabemos vivir.
igorgitelstain.me
Esta imagen de cargar una batería mientras uno lee, mece a su bebé o se adormece viendo una peli, es amable, eco-friendly y nos gusta. Seguramente tendríamos una Mecedora Otarky en casa sin pensarlo mucho. Es bonita, ergonómica, con un aspecto limpio y sin pretensiones.
Pero la filosofía que anima el objeto y al creador es mucho más trascendente e importante, y así lo expresa Gitelstain: “El concepto es el diseño y producción de productos que retornen la energía utilizada en producir esos mismos productos.”
igorgitelstain.me
Un imán deslizándose ayudado por rodamientos a lo largo de una bobina de cobre, sumado a un relajante movimiento tan humano, cómodo, innato: en esta época de cambio necesario y alternativas ineludibles, ligar así nuestra necesidad con nuestra básica humanidad es, sencillamente, genial.
Otros Artículos que te pueden interesar:
- Soft Rocker: Modernismo Ecológico
- El Enchufe Solar para Ventanas
- WikiHouse: Imprime tu Propia Casa
- Hornos y Cocinas Solares. Pon una en tu vida.
- De neumático a energía eléctrica, una nueva alternativa…