Una mujer seductora, mi prima, La deuda

mi prima, la deuda

La deuda era una mujer fuerte y seductora, allí donde pasaba a todos enamoraba, los economistas creían en ella, veían a la mujer perfecta...

Sus curvas, sus líneas, era perfecta para aquellos que sólo tenían ojos para ella.

Todos la deseaban, pensaban que era una diva y a su lado querían estar,  para presumir de que la conocían...

Ella era perversa, sólo quería a los banqueros y a los políticos y algún gran empresario, que entre unos y otros le pagaban todos sus antojos.

Era una mujer ligera, hoy estaba con uno y mañana con otro, no le importan los sentimientos y su ambición era poseerlo todo, quería ser la mujer de todos los grandes del mundo y así tenerlos dominados a su antojo...

Hija de una buena familia, sus padres multimillonarios tenían empresas de petroleo, bancos, farmacéuticas y transgénicos. Eran los dueños de mundo, los más ricos, por eso la deuda no conocía la pobreza sólo veía ricos y así su ambición crecía día a día...

Tenía una agenda  y cada día llamaba a uno de los candidatos que tenía apuntados para que le pagase el capricho del día.

Un día decidió tentarlos a cada uno de los hombres de su agenda, escogió a uno de cada país y todos picaron y cayeron en su tentación, todos son sus víctimas, están atrapados por ella y no saben como dejarla y comenzar una vida nueva...

En esta triste historia de vicio y ambición apareció una joven llamada Cooperativa y ella fue la que salvo a algunos hombres de algunos países que dejaron a La deuda para irse con ella.